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Sanidad abrirá los quirófanos por la tarde para reducir las listas de espera

Sanidad invertirá 113 millones en reducir la espera máxima a 30 días

Los quirófanos de los hospitales públicos tendrán horario de supermercado. Abrirán a primera hora de la mañana todos los días de lunes a sábado, incluso durante las vacaciones, y seguirán operando a pacientes hasta las 21.00. Ésta es la medida que prepara la Consejería de Sanidad para cumplir la promesa de la presidenta regional, Esperanza Aguirre, de que a finales de 2005 ningún paciente espere más de 30 días para ser intervenido quirúrgicamente en la sanidad pública. El plan prevé una inversión de 113 millones y desviar 40.000 pacientes a la sanidad privada.

Si el Plan Integral de Reducción de Lista de Espera Quirúrgica, presentado ayer por Aguirre y el consejero de Sanidad, Manuel Lamela, no tiene éxito, la presidenta regional deberá dimitir en noviembre de 2005, según su promesa electoral.

El plan se estructura en diferentes niveles. El primero es el regional y creará un registro unificado de listas de espera quirúrgica y una central de información a la que pueda acudir el paciente para conocer los detalles de su caso. El registro será público, permitirá conocer en todo momento cuántos pacientes hay en espera y estará supervisado por el Comisionado de Listas de Espera, figura de reciente creación que depende de la Asamblea de Madrid.

La presentación del plan aclaró el desliz cometido por Aguirre hace un mes, cuando afirmó que su promesa de reducción de listas de espera incluía sólo a "juanetes, cataratas y otras operaciones sencillas y no a las más complejas". Sanidad dice ahora que el plan incluye todas las intervenciones quirúrgicas, excepto los trasplantes y las relacionadas con la reproducción asistida.

Ampliación de plantillas

Cada hospital público realizará a su vez un plan interno para conocer su capacidad máxima de operar a enfermos. Estos planes prevén la apertura de los quirófanos durante todo el año de lunes a sábado, desde primera hora de la mañana hasta las 21.00. Para cubrir las nuevas necesidades de personal, Sanidad ofrecerá a los trabajadores ampliar sus jornadas con incentivos económicos. En caso de necesitar más trabajadores, serán ampliadas las plantillas.

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La suma de los planes parciales de cada hospital permitirá a Sanidad prever cuántos enfermos pueden ser operados en sus hospitales. Sanidad cruzará entonces este dato con el Registro Único de Pacientes en Espera. Como es de suponer, siempre habrá más pacientes esperando que los que pueden ser operados por los hospitales públicos. Es en este punto cuando entrará en funcionamiento el segundo pilar del Plan de Reducción de Listas de Espera: el envío de pacientes a las clínicas privadas concertadas. Las previsiones iniciales son que, sólo en 2004, podrían ser operados hasta 40.000 pacientes en clínicas privadas, con un coste para la sanidad pública de 30 millones.

En total, el plan invertirá 113.089.558 euros, 53 este año y 60 el que viene. Este dinero irá a tres partidas principales: pagar a las clínicas privadas, gastos de personal y nuevos sistemas informáticos.

Según datos de la Consejería de Sanidad, el pasado 31 de diciembre había 58.885 enfermos en lista de espera quirúrgica en la región. La demora media para entrar en quirófano era de 57 días, plazo que ahora deberá ser reducido a 30 días de espera máxima en 20 meses.

El plan presentado ayer indica que estos 30 días empezarán a contar "a partir del día siguiente a la fecha en la que se notifique al paciente su inclusión en el registro unificado". Este punto es muy importante para cuando, a finales de 2005, deba evaluarse si Sanidad ha cumplido o no su objetivo. Es el caso, por ejemplo, de un enfermo que sufra una hernia. Tras acudir al especialista, éste le prescribirá varias pruebas y le citará de nuevo para conocer los resultados. Es en esta segunda cita cuando el especialista decidirá finalmente si operar o no al enfermo. Entonces, ¿será el enfermo inmediatamente incluido en el registro unificado? ¿O deberá esperar varios días hasta que Sanidad le "notifique" que ha sido incluido en él? Un portavoz de Sanidad explicó ayer que, según el Real Decreto 605/2003 de 23 de mayo, la inclusión del enfermo en la lista de espera se efectuará desde el primer momento.

PSOE e IU dudan del plan y lo comparan con la Bescam

El PSOE e IU mostraron ayer sus "dudas" de que el plan contra las listas de espera pueda tener éxito y lo compararon con el otro proyecto estrella con el que la presidenta regional empezó la legislatura, las Brigadas Especiales de Seguridad de la Comunidad de Madrid (Bescam), cuya viabilidad no está clara en estos momentos.

"Esto es un nuevo caso de venta de motos de la escudería Aguirre, como la moto de la Bescam, que iba a pedales y sin capacidad de llegar a ningún sitio razonable", declaró el portavoz del PSOE en la Asamblea, Rafael Simancas.

El portavoz de IU, Fausto Fernández, por su parte, señaló que el nuevo proyecto "al igual que la Bescam, se ha vendido a bombo y platillo, pero sin dar detalles claros de cómo va a implementarse y sin contar para ello con los profesionales". "Lo que sí han dejado claro es que aumentará el flujo de pacientes de la sanidad pública a la privada", criticó Fausto Fernández.

El portavoz de Sanidad del PSOE, Lucas Fernández, dudó de que el plan tenga "efectividad". "Sus dos pilares, mayor utilización de los quirófanos públicos y envío de enfermos a las clínicas privadas, son de sobras conocidos. Este modelo se está aplicando desde hace años y ha demostrado tener poco éxito hasta el momento. Además, el PP ya lo ha anunciado otras veces y me parece que no les queda mucha credibilidad en este sentido", añadió el portavoz de Sanidad de los socialistas.

El PSOE citó los que, en su opinión, son los dos talones de Aquiles del nuevo plan: la transparencia a la hora de publicar las listas de espera reales y el retraso en las pruebas diagnósticas. Los socialistas creen que si el Gobierno regional no soluciona estos dos puntos, la reducción de la lista de espera quirúrgica será sólo aparente y no resolverá las demoras de la sanidad pública.

El sindicato de médicos CESM y el de enfermería SATSE, por su parte, declinaron ayer hacer una valoración del plan de reducción de listas de espera.

"De momento sólo hemos conocido los puntos hechos públicos hoy [por ayer]. Estamos convocados a una reunión para conocer el plan con detalle y vamos a esperar a entonces para fijar nuestra posición", coincidieron en señalar los responsables regionales de los dos sindicatos, Isabel López y José María Porras, respectivamente.

Fernando Sánchez, de UGT, lamentó el "déficit de diálogo, consenso y transparencia con el que nace el plan contra las listas de espera".

"Además, sospechamos que el Gobierno regional va a seguir usando y abusando de los conciertos privados y de la extensión de la jornada de los trabajadores sin que apueste por la creación de empleo", añadió Sánchez.

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