La Eurocámara logra los apoyos para proponer hoy que la Carta Magna se firme en Madrid

Una iniciativa del eurodiputado italiano Francesco Rutelli, a raíz de los atentados del 11-M, para que Madrid acoja la solemne ceremonia de la firma de la Constitución europea concitó ayer suficientes apoyos como para que el pleno de la Eurocámara la apruebe y trasmita la petición a los jefes de Estado y Gobierno. La propuesta de Rutelli, ex alcalde de Roma, perteneciente a la coalición de centroizquierda Margarita, recibió el apoyo de socialistas, liberales y verdes, y el compromiso de votar a favor de los eurodiputados españoles del PP.

Rutelli planteó la idea a finales de la pasada semana, cuando la cumbre europea celebrada en Bruselas desbloqueó las negociaciones sobre la Constitución, y la plasmó después en una enmienda incluida en una resolución que hoy votará la Eurocámara sobre los resultados de esa última cita de los jefes de Estado y Gobierno de la UE. En virtud de la enmienda, el Parlamento "pide al Consejo Europeo que organice la ceremonia solemne de la firma del futuro Tratado constitucional en la ciudad de Madrid, como acto simbólico, con el fin de afirmar que la respuesta más eficaz al terrorismo y a su mensaje de terror y barbarie reside en la fuerza de las instituciones europeas y en la promoción de un proceso de participación libre, civil y democrático".

La propuesta, como ha reconocido el propio Rutelli, contiene una carga de profundidad contra José María Aznar y contra Silvio Berlusconi. El presidente del Gobierno en funciones favoreció el bloqueo de la Constitución y ahora será sustituido por quien tiene entre sus prioridades la rápida aprobación de la Carta Magna europea. En cuanto al primer ministro italiano, siempre aspiró a que fuera Roma el lugar para la solemne firma.

Por ese motivo, el Grupo del Partido Popular Europeo (PPE) -el más amplio en la Cámara, con 233 escaños de un total de 626- mantiene una gran prudencia. Su líder, el alemán Hans-Gert Poettering, ha seguido sosteniendo estos días que Roma le parece un lugar adecuado para la firma. Los populares no han estampado su firma junto a la de Rutelli en el texto de la enmienda.

Pero hubiera sido un contrasentido que algún eurodiputado español no apoyara la candidatura de Madrid y, por eso, los parlamentarios del PP aseguraron ayer que votarán a favor de la propuesta. El jarro de agua fría vino de boca del presidente de turno de la UE, Bertie Ahern. El primer ministro irlandés anunció que la propuesta oficial manejada hasta el momento consiste en que se celebre una ceremonia específica en cada país. "Pero aún no hemos acordado nada todavía", añadió, sin entrar a valorar la iniciativa de Rutelli.

Lo que sí aclaró Ahern en la Eurocámara es que la negociación sobre el nuevo reparto de poder en la Unión que se incluirá en la Constitución estará basada en el sistema de doble mayoría (de Estados y población) que Aznar siempre ha rechazado. Una vez desbloqueadas las negociaciones en la pasada cumbre, Ahern prevé que la Constitución quede pactada en la cumbre de mediados de junio, unos días después de las elecciones europeas del 13 de ese mismo mes.