Mas suspende al Ejecutivo y asegura que ni es "progresista ni catalanista"

Convergència i Unió (CiU) considera que después de 100 días de gobierno ha quedado demostrado el "falso progresismo" y la "escasa catalanidad" del Ejecutivo de Pasqual Maragall y la supremacía política de los socialistas frente a Esquerra Republicana e Iniciativa. El jefe de filas de CiU, Artur Mas, realizó ayer un balance rayano al catastrofismo sobre la inicial travesía del tripartito pese a admitir que se ha tratado de una etapa "atípica, removida y de cierta excepcionalidad".

Más de 50 minutos empleó ayer Mas para exponer su particular y crítico balance sobre la actuación del Gobierno catalán y los primeros 100 días de CiU en la oposición. Una intervención que complementó con un informe, presidido por la foto de José Luis Rodríguez Zapatero en el balcón de la Generalitat junto a Maragall, en el que se presentan los "100 motivos para suspender" al tripartito.

"Este Gobierno, ni gobierna ni gobierna bien", sentenció Mas. El líder de la oposición basó su diagnóstico en que el Ejecutivo "carece de un modelo claro"; ha incumplido las promesas electorales; ha "recortado" las medidas sociales y mantiene a "bajas revoluciones" la Administración. En consecuencia el Gobierno ha "engañado de forma descarada", denunció.

En opinión de Mas, este primer trimestre ha evidenciado sobre todo que no se trata de un Gobierno "tricolor" sino "monocolor", porque en todas las situaciones críticas o de desavenencias internas, los socialistas han impuesto sus tesis a republicanos y ecosocialistas. Unos socios, pronosticó, que "acabarán siendo convidados de piedra" a causa del "excesivo poder en manos del PSC".

Junto al recorte de ayudas sociales, Mas denunció el "debilitamiento" de la catalanidad del Gobierno, lo que encontró paradójico debido a la presencia de ERC. Por una parte, aseguró, la Generalitat "depende más que nunca de Madrid" y, por otra, ERC ha incumplido su promesa de crear un departamento de Exteriores y ha apoyado el cierre de las delegaciones en Roma y Casablanca.

Por su parte, el Partido Popular presentará un centenar de preguntas sobre la acción del Gobierno y que figuran en un anuncio publicado ayer en la prensa. Daniel Sirera calificó la publicidad de "engañosa".