_
_
_
_

El Senado italiano aprueba la reforma federal que exige Bossi

Enric González

El Senado italiano aprobó el jueves, en primera lectura, una reforma de la Constitución para reforzar los poderes del presidente del Gobierno y para dotar de autonomía a las regiones. Fue un paso adelante de la "reforma federalista" exigida por la Liga Norte y los parlamentarios de ese partido la consideraron casi un homenaje a Umberto Bossi, el líder hospitalizado en una unidad neurológica de Varese. Lo primero que hicieron fue llamar a la esposa de Bossi para que supiera la noticia.

La oposición de centro-izquierda, en cambio, abandonó el hemiciclo como protesta contra un proyecto que calificó de "chapuza", e incluso el vicepresidente de la Cámara alta, Domenico Fisichella, de la derechista Alianza Nacional, calificó la reforma de "desestabilizadora" y "caótica".

La votación del jueves por la noche, con el resultado de 156 a favor y 110 en contra, constituía un compromiso que Silvio Berlusconi había contraído con Bossi, el gran jefe de la Liga. Con éste en coma inducido tras una crisis cardiaca con efectos en el cerebro, la Liga Norte exigió que el trámite se cumpliera y amenazó con abandonar el Gobierno en caso contrario. Berlusconi disponía de una mayoría suficiente incluso sin la Liga, pero no faltó a su palabra.

Desinterés popular

Se trató de un simple trámite, muy tormentoso, pero sin consecuencias inmediatas. El proyecto de reforma, que otorga más poderes al futuro primer ministro (actualmente se denomina presidente del Gobierno), entre ellos el de disolver el Parlamento, reduce al presidente de la República a un papel casi simbólico, concede a las regiones plenos poderes en materia de educación, sanidad y policía local y hace del Senado una Cámara federal, pasará ahora a la Cámara de Diputados para ser debatida punto por punto y en su caso modificada, volverá al Senado para un nuevo debate pormenorizado y finalmente será sometida a un referéndum, exigido por la oposición.

Falta mucho para saber si la reforma constitucional será aprobada en los actuales términos o si, como muchos observadores creen, serán limados algunos de los poderes regionales más significativos. Mucho dependerá de si Bossi se recupera, de si la Liga obtiene un buen resultado en las elecciones europeas de junio y de si la población italiana consigue interesarse al fin por un proyecto político de gran calado que, por ahora, sólo tiene repercusión popular en el norte del país. Una encuesta publicada ayer por el diario La Repubblica indicaba que un 60% de los italianos no sabe en qué consiste esta constitucional.

Por el momento, en el proyecto de ley ya ha sido introducida, gracias a una enmienda de Alianza Nacional, una cláusula que reduce el calado de la transferencia de poderes a las regiones. Esa cláusula establece que el Gobierno de Roma puede anular leyes regionales o reasumir cualquier poder transferido cuando se vea afectado el "interés nacional", sin más precisiones.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_