Zapatero afirma que cambiará la política de inmigración

El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, remachó ayer en Canarias su firme propósito de dar un giro a la política de inmigración que ha seguido hasta ahora España con el Gobierno del PP. "Habrá un cambio que tiene como eje central un gran acuerdo nacional en materia de inmigración", dijo el líder socialista en Lanzarote, informa la agencia Efe, momentos antes de abandonar la isla rumbo a Madrid después de haber pasado tres días de descanso con su familia.

Zapatero intentará que desde el Gobierno que él presida, dentro de muy pocas semanas, se cumpla su objetivo de que la política de inmigración pase a formar parte del bloque de asuntos de Estado y, por tanto, que se excluya de la controversia política.

El líder socialista pidió al Gobierno del PP desde que fue elegido secretario general hace cuatro años que convocara al PSOE y al resto de las fuerzas políticas para llevar adelante un Pacto de Estado sobre Inmigración. El PP no quiso este acuerdo y la primera ley del Gobierno terminó en el Tribunal Constitucional porque esa norma no reconoce a los inmigrantes los derechos de reunión, huelga, manifestación y sindicación

La responsable de Políticas Sociales e Inmigración del PSOE, Consuelo Rumí, explica que en el programa electoral no figura la regulación de estos derechos a la espera de que el Tribunal Constitucional se pronuncie lo que, a su juicio, ya no puede tardar demasiado porque han transcurrido dos años y medio desde que se presentó el recurso.

Rumí asegura que su partido sigue defendiendo esos principios toda vez que, a su juicio, se trata de defender "derechos de las personas", con independencia de que sean o no inmigrantes".

Reglamento

Rumí pidió ayer al Gobierno en funciones que no apruebe el reglamento de la Ley de Extranjería, que quedó pendiente en la anterior legislatura, porque ese trabajo corresponde ya al futuro Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero. Rumí dijo a Europa Press que no tuvo ocasión de conocer el borrador que preparaba el actualmente Gobierno en funciones y que tampoco llegó a mantener ninguna reunión con el delegado del Gobierno de Extranjería e Inmigración del Gobierno del PP, Gonzalo Robles.

Por otra parte, el líder socialista rehusó entrar en consideraciones sobre el comunicado de ETA, llamando al diálogo al nuevo gobierno que presidirá Zapatero, porque nunca lo ha hecho. "El único comunicado que espero de ETA, como todos los españoles, es que abandona la violencia".