Chamizo apela a la "rebeldía" para superar los problemas de la inmigración, la droga y el paro

El defensor del pueblo andaluz, José Chamizo, reivindicó ayer la "rebeldía" histórica y espíritu "liberal" de Cádiz para acabar con los dramas de la inmigración clandestina, la droga, el paro o los enfrentamientos fruto de localismos "estúpidos". "Cádiz de las coordinadoras contra la droga y de los sindicalistas infatigables. Cádiz de los hijos de un dios menor y de los inmigrantes muertos o sobrevivientes al más peligroso de los mares", fue uno de los pasajes del discurso que pronunció Chamizo tras ser nombrado hijo predilecto de la provincia de Cádiz ante un repleto salón regio de la Diputación.

El presidente de la corporación provincial, Francisco González Cabaña, propuso además en el Día de la Provincia de Cádiz un gran acuerdo entre todas las administraciones para impulsar el desarrollo de la provincia. Fiel a su estilo y compromiso con las personas más desfavorecidas y los colectivos marginales, Chamizo (Los Barrios, 1949), aprovechó su mensaje para poner el acento en los grandes problemas sociales y laborales que sufren los gaditanos, como el paro o el conflicto de los astilleros. "Cádiz, de hombres que ven pasar los lunes al sol, y los martes y los miércoles, y los jueves y los viernes; Cádiz de reconversión naval con los frigoríficos volando", afirmó Chamizo, quien añadía más tarde: "Cádiz de la lista del paro y de la lista de adjudicatarios de viviendas imposibles, del todo a un euro y del todo por la patria".

El fenómeno de la inmigración clandestina y las dificultades legales que encuentran estas personas para residir en España fue uno de los asideros en los que se agarró Chamizo para criticar, sin citarla expresamente, la Ley de Extranjería. "Cádiz es, sobre todo y desde hace 200 años, la cuna de la libertad y de la dignidad de los españoles. Y cuando digo españoles, no sólo me refiero a los que quedamos en esta balsa de piedra que es la península Ibérica, sino a esos otros españoles americanos, filipinos o africanos a los que ahora exigimos pólizas, visados y certificados de buena conducta para dejarlos entrar en su madre patria que ahora se empeña en olvidarles porque le ha dado por practicar el salto de altura al otro lado de los Pirineos o al otro lado del Canal de la Mancha", lamentó Chamizo, quien aprovechó esta reflexión para cuestionar también la participación de España en la guerra de Irak: "Hemos renunciado, por cierto, a Celestino Mutis y hace justo un año nos embarcamos en una guerra pirata con Erroll Flynn y con Sir Francis Drake".

Con singular vehemencia se empleó para denunciar los localismos exacerbados en algunos municipios gaditanos. "Qué pena que no hagamos bandera de Fermín Salvochea y de su sentido de la justicia, sino que nos limitemos a ser localistas hasta la médula, localistas hasta la estupidez, localistas hasta el enfrentamiento entre pueblos que debieran ser hermanos y que, de esta forma, lamentablemente, sólo suelen hacer el primo, a favor de intereses extraños que siempre terminan derribando sus murallas", dijo.

El nuevo hijo predilecto de la provincia gaditana tuvo un recuerdo especial para las víctimas de la droga y la prostitución: "Cádiz, parte de un mundo que también ha sucumbido a las vacilaciones que provoca el dinero fácil a costa de expandir el veneno en la vida de mucha juventud (...) Tierra de luchadores contra el veneno que ha contaminado la sangre andaluza (...) Cádiz de mujeres cobijadas o tapadas en Vejer o en Tarifa; de mujeres dignas en cualquier ciudad".

Previamente, 10 entidades o personas recibieron la placa de oro de la provincia en reconocimiento a su trabajo o compromiso por Cádiz. Fueron galardonados el padre Manuel Flores; el empresario Miguel Rodríguez; la coordinadora antidroga REDEIN; la Comunidad de la Salle de Puerto Real; la Universidad de Cádiz; el Grupo Joly; Quórum Libros; el Grupo de Empresas Polanco; Transportes Internacionales Ferris, y el Parque Natural de la Sierra de Grazalema.