Leer, una carrera de fondo
Amigos del Libro Infantil recrea en Almería una pista de tenis y atletismo para invitar a la lectura a los más pequeños
Una medalla cuelga ya del cuello de Juan Burgos, un chaval de 11 años que cursa Sexto de Primaria. La ha ganado en un deporte insólito y también original: los 400 Metros Libros. "Está divertido. Sales por tu calle y tienes que llegar a meta, pero antes debes leer tantos libros como te encuentres. Yo me he leído tres, entre ellos el de Kika superbruja", explica Juan. Su hermana Cristina, de nueve años y también con medalla, optó por pasar las pruebas de anagramas, greguerías, acrósticos y sopa de letras.
Pero el recorrido literario-deportivo de los hermanos no acabó ahí: a Juan le quedaron aún fuerzas mentales para echar una partida al tenis-cuentos, en el que debía proseguir una historia improvisada antes de lanzar la pelota a su contrario. Son sólo algunas de las actividades que estos días ofrece la Asociación del Libro Infantil (Alin) con el patrocinio del Instituto de Estudios Almerienses (IEA) en al patio de luces de la Diputación, bajo el título El deporte de la lectura.
"Perseguimos fomentar la lectura y el deporte, ya que es un aspecto que llama a los niños. Porque las dos actividades tienen confluencias: se consiguen grandes metas, te despejan la mente y, a veces, es también una cuestión de equipo. Hemos planteado la muestra desde el punto de vista lúdico en el que los libros y también las imágenes están presentes", expone la presidenta de Alin, Marisa Zapata.
Como en cualquier deporte, la exposición de Alin también dispone de árbitros que, para esta ocasión, lo que arbitran son las palabras y cuentan historias a los más pequeños. Los cuentacuentos Pepe Maestro y Alexis Díaz Pimienta serán los encargados de narrar historias hasta el próximo 27 de marzo, día de clausura de la muestra. Una exposición de libros ilustrados, otra de libros monográfica sobre deporte y un montaje audiovisual que ensalza los valores de la lectura sirven de aderezo a la magna exposición. En ese vídeo personajes como José Maria Íñigo, Karina, Imanol Arias y Alfredo Amestoy, entre otros, invitan a los más pequeños a leer "de seguido" un libro.
El broche final lo pone la treintena de ilustradores de talla nacional e internacional que, invitados por Alin, han relacionado con dibujos fantásticos deportes como el voleilibro, lucha libro, Remo y Rómulo: lectura de clásicos, lanzamiento de poesía, futlibro, líbpica y narración estilo libro, entre otros. Fuencisla del Amo, Tino Gatagán, Olga Mir, Marina Seoane, Javier Zabala o Miguel Ángel Monleón son algunos de esos ilustradores. Todos ellos presentan sus dibujos con una pequeña explicación. Así, del waterlibro, Anne Decis dibuja a una niña sumergida en el mar con un cuento "porque un libro te sumerge en mundos desconocidos, porque tiene un poder de atracción increíblemente fuerte. Porque va a lo profundo de las cosas".
Estela María, de 11 años, resalta el "esfuerzo" que implica leer un volumen y no le importa reconocer que prefiere las divertidas historias de Pepe Maestro. "Es lo que más me ha gustado. Ese cuentacuentos es muy gracioso por los gestos que hace y por las historias que cuenta", asegura la niña.
"Leer es un esfuerzo a cuyo premio no se llega sin entrenamiento, sin una escalera de libros anteriores que empieza aquella noche en la cuna en la que la historia contada por tu madre tuvo por primera vez la capacidad de hacerte soñar. Magia", firma Gonzalo Moure en el escrito que aporta a Alin para defender la valía de la literatura. Los chavales participantes, que han "sudado" sus medallas, lo han aprendido muy bien visitando El deporte de la lectura.
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