El Mallorca se hace un siete

El Mallorca se complicó la vida cuando mejor lo tenía. Tras controlar la primera parte sin agobios, en la segunda se le ocurrió abrir el marcador y despertar equipo inglés de su letargo. El Newcastle, un equipo que se hunde cuando no tiene la pelota pero se crece cuando el fútbol se calienta, marcó tres goles en 10 minutos y aún consiguió uno más para acabar de ponerse la eliminatoria viento en popa ante un equipo que parece más pendiente de salvar la categoría que de hacer historia en Europa.

El Mallorca empezó dominando la pelota y poniendo cerco a la meta defendida por Given. Pero aunque controlaba el balón le costaba un mundo llegar con él hsata el área rival. El Newcastle apelaba al estilo inglés: balones largos.Mientras, Eto'o se topaba con la rigidez de un linier que le acribilló a fueras de juego, unos más justificados que otros.Ya había tenido un par de malos augurios el Mallorca nada más arrancar la segunda parte: ese saque de centro largo que se perdió por el fondo, muy distinto de su control en el primer periodo.

Pero cuando todo empezaba a parecer fácil para el Mallorca, Bellamy pilló un balón de oro rechazado hacia atrás por Lussenhoff en su salto con Shearer y empató el partido. Al poco, Shearer peinó magistralmente el balón a la salida de un córner para poner al Newcastle por delante. En pleno desbarajuste mallorquín, Robert dejó su tarjeta de visita con un golpe franco desde 40 metros y un defensa, Bramble, redondeó la cuenta colocando un terrible 4-1 que parece insuperable para el Mallorca.