Aguirre propone dos soluciones para la R-3 que ya están hechas

La presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, "reacciona tarde y mal" para solucionar los problemas de incomunicación de los 57.000 vecinos del distrito de Vicálvaro, según el diputado socialista en la Asamblea José Quintana. Los vecinos están muy molestos con las declaraciones de la presidenta, ya que las dos soluciones que planteó el pasado jueves en la Asamblea "ya estaban hechas y no solucionan nuestro problema", afirmó ayer Daniel Viondi, miembro de la Plataforma Salvemos la Avenida de Daroca.

Precisamente esta avenida, que era el acceso principal del barrio tanto al centro de Madrid por la N-100 (prolongación de O'Donnell), como con la M-40, fue cortada por la construcción de la autopista de peaje R-3, inaugurada hace dos semanas.

Aguirre admitió el pasado jueves el problema de incomunicación de Vicálvaro y señaló como posible solución construir "un nuevo ramal desde la rotonda de la carretera de Canillejas que enlace directamente con la N-100 por encima de la rotonda de Fuente Carrantona". Sin embargo, este acceso ya existe desde el pasado julio. Se trata de una vía de servicio que los vecinos calificaron durante la manifestación del pasado febrero de "provisional y precaria", según Viondi.