Dolor de España
A mí también me duele España, como a todos. Es como un runrún pegado al oído (una suerte para Esperanza Aguirre, porque si fuera como un dolor de juanetes me iba ahora mismo a Madrid y le colapsaba un hospital) del que no me puedo deshacer: ¿cómo garantiza el PP la cohesión de España, si es el partido que más rechazo provoca en Cataluña y el País Vasco, los dos únicos territorios donde se cuestiona la unidad de España? Convencer de la unidad de España a los que ya están convencidos es muy interesante, pero el problema es convencer a los menos partidarios. En fin, yo qué sé, seguramente no tiene importancia. Procedo a hacer unos chistes.
¿Han visto el anuncio de Hyundai? Un cirujano plástico está operando a un paciente y, al levantar la sábana, ve que le ha colocado una oreja en la nariz. El cirujano se asusta, se acerca a la oreja/nariz y le dice al paciente:
- Que esto quede entre nosotros.
¡Eso es el PP! No me explico cómo emiten ese anuncio en La 1. Hace días que pienso en una parodia, pero me asaltan dudas: ¿Quién sería el cirujano? ¿Paco Cascos con su AVE? ¿Ánsar con su guerra? ¿Rajoy con sus hilillos de plastilina? Empecé a darle vueltas al oír a Rajoy alertar contra el PSOE: "No podemos dejar el Gobierno en manos de aficionados".
- Que no se te vea el desdén, Mariano, por favor. Recuerda que tienes otro talante.
Está preocupado Gabriel Elorriaga, porque Rajoy ha prometido que, con mayoría absoluta, cada ministro podrá pedir un deseo.
- Quien quiera invadir Perejil, invadirá Perejil; quien quiera presentar una receta de cocido, podrá hacerlo; quien quiera implantar religión obligatoria en la escuela, podrá hacerlo, ¡y quien quiera mentir, podrá mentir sin complejos!
El escándalo fue mayúsculo, porque Rajoy no se daba cuenta de que esos deseos ya estaban cumplidos. Por suerte, nadie se hizo eco del despiste.
Y la encuesta del CIS: la mayoría desea que gane ZP, la mayoría cree que ganará MR.
- ¿Conclusiones, Gabi?, pregunta Rajoy.
- Urdaci es un machote.
- Colosal. Ya lo dijo Arenas: hay que hacerle un monumento.
- ¿Conclusiones, Pepe?, pregunta ZP.
- Muchos saben lo que no quieren, y pocos saben lo que quieren. Una mayoría está hasta los juanetes del PP, pero nosotros convencemos poco, y gracias a que confían en que no ganaremos, a lo mejor ganamos.
- ¿Y a quién hay que votar?, pregunta Caldera, que está mosqueado porque ayer se enteró de que su vicepresidencia no es segura. "Un puesto importante", ha dicho ZP. Como le haga Defensor del Pueblo o algo así, se va a enterar.
- Nosotros a lo nuestro, a garantizar el diálogo entre españoles. Ése es nuestro modelo.
- El diálogo es un instrumento, no un modelo, jefe.
- No menospreciemos el instrumento, Jesús -tercia Blanco-, que Rocco Siffredi llegó muy lejos sólo con instrumento.
Pero Jesús no acepta la broma. Está mosqueado en serio y sale del despacho un poco triste, pensando que están conchabaos.
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