_
_
_
_

Trifulcas con el alcalde Gallardón

Las peleas entre la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ambos del PP, comenzaron desde incluso antes de que Aguirre jurase su cargo. Precisamente ese día, el pasado 21 de noviembre, la presidenta impuso a Gallardón que no pronunciara ningún discurso en la ceremonia que la convertiría definitivamente en presidenta de la Comunidad. Ése fue el comienzo. A partir de ese momento y después de que la presidenta admitiera que existen "diferencias políticas" entre ella y Ruiz-Gallardón. Luego vinieron excusas. Gallardón no asiste a la fiesta del 25º aniversario de la Constitución organizada por Aguirre, ni asiste a un almuerzo organizado por la presidenta argumentando problemas de agenda. Desplantes antes de comenzar en la batalla política.

Regidor

El alcalde firmó un convenio siendo él también presidente de la Comunidad en funciones por el que obligaba a la nueva presidenta a perseguir fuera de la región a los deudores municipales. Algo que sentó como un tiro dentro del nuevo Ejecutivo. La respuesta de Aguirre no se hizo esperar. Fue

entonces cuando la presidenta anunció su intención de paralizar las obras del teatro del Canal, uno de los proyectos comenzados por Ruiz-Gallardón, su antecesor en el cargo, y que definió el teatro como "uno de los más importantes de Europa". Aguirre aseguró que el proyecto le parecía caro y "no prioritario". Tras este anuncio de la presidenta, Gallardón respondió denunciando el convenio entre el Canal de Isabel II y el Ayuntamiento, y exigió a Aguirre su modificación. En resumen, el alcalde le pedía a la presidenta (el Canal es una empresa dependiente de la Comunidad) un nuevo acuerdo financiero más favorable para el Ayuntamiento. Aguirre, entonces, anuncia que las obras del teatro del Canal seguirían adelante, pero sin poner ni un céntimo más de lo presupuestado (108 millones de euros).

Aguirre también anuncia en ese momento que tumbará otro de los proyectos puestos en marcha por Gallardón: el Festival de Verano. Melómano reconocido, el ex presidente de la Comunidad, organizaba un festival en el que el pianista y director de orquesta Daniel Baremboin y la Staatsoper de Berlín ofrecían un par de óperas y varios conciertos una vez terminada la temporada de abono en el Teatro Real. El presupuesto de 2,4 millones de euros le parece muy alto a Aguirre y una de las óperas programadas, Moises y Aaron, de Shönberg, le parece "minoritaria". Aún está por definir qué se hará en lugar de este festival. La presidenta tampoco quiere que la Comunidad pague la grabación de la ópera de Albéniz Pepita Jiménez por el tenor Plácido Domingo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_