Simancas acusa al alcalde de Boadilla, del PP, de usar medios públicos para atacarle
El portavoz socialista sólo reconoce una "opción de compra" de la casa, que está acabada
El alcalde de Boadilla, Arturo González Panero, del PP, lleva meses difundiendo notas del Ayuntamiento en las que critica al líder del PSOE madrileño, Rafael Simancas. Panero denuncia que Simancas adquirió un chalé en Boadilla hace tres años por 150.000 euros y ahora vale 480.000. Simancas, durante la campaña electoral de mayo, sólo admitió que había entregado "28.584 euros como opción de compra" de esa vivienda. Simancas aseguró ayer que aún no es dueño de un chalé -terminado en septiembre- y acusa al alcalde de usar el Ayuntamiento "como un cortijo".
El alcalde de Boadilla puso en marcha, por primera vez, la maquinaria informativa del Ayuntamiento contra Rafael Simancas en septiembre de 2003. González Panero, que está afiliado al Partido Popular, envió una nota a los medios de comunicación donde detallaba el valor de mercado - 480.809 euros- del chalé que Simancas, secretario general de la Federación Socialista Madrileña (FSM), había adquirido hace tres años, según el alcalde, y hace cinco, según el portavoz socialista.
El regidor boadillense señalaba en su nota que Simancas había adquirido la vivienda por 150.250 euros. Añadía González Panero que, además, la casa, "tras triplicar su valor, convertirá a Rafael Simancas en beneficiario directo del encarecimiento de la vivienda en los últimos años".
"Difundimos esta primera nota pensando que iba a ser la última, para demostrar que Rafael Simancas no sólo tenía unos derechos urbanísticos de 28.290 euros, como él dijo durante la campaña electoral, sino un chalé valorado en mucho más dinero", explica el regidor de Boadilla.
Firma de escrituras
Pero los ataques del alcalde contra Simancas no quedaron ahí. A esta primera notificación oficial, le siguieron otras dos más. La última, el pasado jueves. El comunicado del Ayuntamiento de Boadilla comenzaba con la siguiente frase: "El temor a ser sorprendido en un renuncio antes del 14 de marzo [fecha de las próximas elecciones al Parlamento nacional], llevó ayer a Rafael Simancas a no acudir a la citación ante el notario para la firma de escrituras de su nuevo chalé en Boadilla del Monte". El primer edil sostiene, además, que la esposa de Simancas, María José Sánchez, contactó con la promotora para comunicarle que no había recibido noticias sobre la firma de la escritura y, por lo tanto, no había podido acudir a la cita. Por este motivo, la esposa del líder socialista proponía a la promotora retrasar la firma hasta después del 14 de marzo, dada la gran cantidad de trabajo y actos públicos que su marido tenía previstos durante la campaña electoral.
González Panero sostiene que lo único que persigue el Ayuntamiento de Boadilla con estas comunicaciones oficiales es demostrar que el secretario general de la Federación Socialista Madrileña tiene un chalé en Boadilla del Monte y que lo quiere adquirir. "Y no, como él dice, unos derechos urbanísticos sin concretar. A mí me da lo mismo cuándo escriture la vivienda. Yo lo único que digo es que Simancas es el primer beneficiario de la especulación urbanística", insiste el alcalde.
De hecho, en la última comunicación municipal se afirma que el comportamiento de Simancas en esta cuestión "no parece que pueda ayudar en mucho al candidato socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, quien ha prometido luchar contra la especulación inmobiliaria como parte de su programa electoral".
Pero el regidor no para ahí en sus explicaciones sobre las propiedades del dirigente socialista madrileño. Insiste en que el PSOE ha intentado por otros medios retrasar la concesión de la licencia de primera ocupación de los chalés. "Incluso, el grupo municipal socialista de la localidad manifestó que existían irregularidades en la construcción de los chalés, para intentar parar la entrega de las viviendas. Sin embargo, los técnicos municipales, que no encuentran defectos de construcción, dieron el visto bueno a las viviendas y se concedió la autorización para habitarlas", afirma el alcalde.
El portavoz del PSOE en Boadilla, Enrique Hernández, reta al alcalde a que demuestre que los socialistas han puesto obstáculos para entregar las viviendas. "Es todo una manipulación. Lo que me parece indecente es que desde el Ayuntamiento se utilicen informaciones privadas para atacar políticamente a una persona", argumenta Hernández.
"Lo que olvida el alcalde", agrega el edil socialista, "es informar sobre el retraso que se ha producido en la construcción de estos chalés, que empezó en 1998 y se entregan ahora, transcurridos seis años".
El concejal socialista también recuerda que hubo problemas en los chalés debido a que en un principio fueron proyectadas 84 viviendas, y que tras un cambio aprobado por el Ayuntamiento, se pasó a 105, lo que provocó que los vecinos denunciaran que los jardines se habían reducido de 100 metros cuadrados a 40.
Gestora de comuneros
Por su parte, Simancas manifestó ayer que en 1998 entregó 4,5 millones de pesetas "como opción de compra" a una gestora de comuneros que iba a construir unos chalés en Boadilla. "Por lo tanto, no era una compra fehaciente, sino sólo una opción. Yo no era propietario de nada. Ya en septiembre de 2003, nos comunicaron que se había terminado de construir y que fuéramos a ver si había desperfectos en la casa", admite.
Simancas explica que aún no puede vender la vivienda porque la hipoteca fue solicitada en su nombre por la gestora de comuneros a una entidad financiera catalana. "Lo que haré será, en todo caso, subrogarme en esa hipoteca", señala. "Pero yo no tengo aún ningún chalé", agrega.
Simancas tilda de "absolutamente intolerable" que un alcalde utilice el Ayuntamiento como un cortijo propio" y que use el Consistorio para atacarle.
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