_
_
_
_

Empleados de los parquímetros reclaman mejoras laborales

Un centenar de ellos se manifestaron ayer frente al Ayuntamiento

Los empleados del servicio de estacionamiento regulado por parquímetros están decididos a conseguir un convenio que mejore sus condiciones laborales. Con ese fin, más de un centenar de ellos se concentraron ayer frente a las empresas que gestionan el servicio, antes de manifestarse frente al Ayuntamiento. Posteriormente decidieron, si las negociaciones no avanzan, convocar en marzo cuatro días de huelga.

Más información
Del ruego a la agresión

Un salario de 600 euros al mes por 40 horas de trabajo semanales repartidas en turnos rotatorios. Éstas son, en líneas generales, las condiciones laborales de los 500 empleados que cada jornada, haga frío o calor, vigilan la correcta utilización de las zonas de estacionamiento reguladas por parquímetros. Un salario y unos turnos rotatorios que incluyen trabajar tres sábados al mes, lo que supone "una calidad de vida nula", en palabras de Margarita García, de CC OO, y portavoz del centenar de empleados que se manifestaron ayer ante la Casa de la Villa para recordar al gobierno municipal su vinculación con un servicio que gestionan tres empresas privadas.

Al lado de Margarita, Pilar Ramírez apunta la razón última de la manifestación: "Peleamos por un convenio colectivo". Un convenio que aún no existe en Madrid, a diferencia de otras ciudades que cuentan con parquímetros, como Barcelona y Pamplona.

Ese convenio facilitaría que los empleados tuvieran condiciones laborales homogéneas independientemente de la empresa adjudicataria para la que trabajen: Domier (Ferrovial), Aysa (FCC) y Sufi-Setex (una unión temporal de empresas). Esta última es la que, a juicio de los manifestantes, tiene turnos más complicados para los empleados. Así, una semana desarrollan su jornada desde "las nueve de la mañana a las 16.00. Otra semana tienen que trabajar desde las 13.00 a las 20.00 y hay, por último, un tercer turno con jornada partida (de 9.00 a 13.00 y de las 16.00 a las 20.00). A esos turnos rotatorios hay que añadir que trabajamos tres sábados al mes", explica García.

Las negociaciones con las empresas "se estancaron al abordar los salarios", según la delegada de CC OO. Los empleados reclaman que los 600 euros actuales -"en Madrid no se puede vivir con ese dinero", apunta García- pasen a 900 o 1.000 euros, como cobran en otras ciudades.

La próxima reunión con las empresas está fijada para el lunes 1 de marzo. En principio, "les damos un voto de confianza". Tras el encuentro está convocada una asamblea y, si es necesario, convocar nuevas movilizaciones, incluidas cuatro jornadas de huelga, los días 11, 17, 24 y 25 de marzo.

La postura del gobierno municipal es de "mantenerse al margen del conflicto", señala García. Desde la oposición, Julio Misiego, de IU, denuncia que "las empresas cuentan con beneficios garantizados y deben mejorar la situación de los trabajadores".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_