Dimite la edil del PP de Santa Fe que justificó un panfleto que llamaba a linchar a los gitanos

La concejal popular de Santa Fe María José García presentó su dimisión ayer, forzada por su propio partido, por haber afirmado que el folleto que animaba a linchar a los gitanos "decía grandes verdades". El PP calificó las declaraciones de "poco afortunadas" y aseguró que la edil las realizó "a título exclusivamente personal". En su carta de renuncia, García condenó el anónimo y justificó el abandono de su cargo por el bien de su formación. El Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, abrió de oficio una investigación para esclarecer el reparto de los panfletos entre los vecinos el viernes pasado.

El coordinador general del PP de Granada, Antonio Ayllón, explicó que el partido consideró conveniente pedir a María José García que dimitiera por sus "desafortunadas" declaraciones. Ayllón aseguró que la decisión se había tomado tras consultar su caso con afiliados y cargos públicos del partido. Pero antes de que a última hora del lunes se reuniera el comité ejecutivo de Santa Fe para tomar medidas, la presidenta del PP en el pueblo, María Ángeles Trasierra, ya le había pedido que abandonara.

Trasierra fue precisamente la encargada de leer ayer la carta de renuncia de su ex compañera de grupo. En ella, García aseguraba que dimitía por el bien del partido y que en sus declaraciones no habló como concejal sino que expresó su opinión particular. "Nunca dije que esas verdades hayan sido provocadas por los ciudadanos de etnia gitana", escribió la ex concejal que condenó el anónimo afirmando que "su contenido es xenófobo y racista para todos vecinos".

Durante el pleno municipal de ayer -al que no acudieron las asociaciones gitanas- la Corporación aprobó una declaración institucional en la que se condenaba "el intento irracional de alterar la convivencia pacífica y democrática". "No vamos a permitir ningún revanchismo por parte de nadie, porque se enfrentará a toda la corporación municipal", decía el comunicado en el que los concejales decían sentir vergüenza porque el pueblo se haya relacionado con un hecho tan deplorable. "Exijo, como máximo representante de todos los vecinos de Santa Fe sin distinción de etnias ni creencias, respeto a todos, sin el cual, no hay ni puede existir libertad".

Mínima aclaración

El Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, abrió una queja de oficio para investigar cómo y quién repartió las octavillas entre los vecinos. "Dada la gravedad de los hechos, nos ha parecido que, cuanto menos, merecen una aclaración", dijo el defensor, que ayer mismo solicitó información al Ayuntamiento sobre los panfletos. Varios vecinos de Santa Fe han enviado quejas a la institución, que según declaró a EFE, serán "oportunamente contestadas"

Mientras, las reacciones a la convocatoria xenófoba se suceden entre el colectivo gitano. La Federación de Mujeres Gitanas de Andalucía Fakali y la Asociación de Mujeres Universitarias Gitanas Amuradi, suscribieron un escrito en el que se decía que el panfleto "atenta contra la dignidad de todos los andaluces" y "ataca la dignidad del pueblo gitano y de todos los habitantes de Santa Fe". Las asociaciones reclaman a las autoridades que actúen contra el autor o autores de dicho escrito. Las declaraciones de la ex concejala del PP, según las mujeres gitanas, "justifican el escrito racista y la sarta de mentiras e insensateces en él expresadas".

La Fundación Secretariado General Gitano (FSGG) expresó su apoyo al alcalde por haber denunciado los hechos ante el fiscal jefe del TSJA, Jesús García Calderón "porque existen claros indicios de delito". La FSGG estudia personarse como acusación particular en caso de que se identifique a las personas que redactaron y repartieron el panfleto. Su contenido reclamaba la unión de todos los payos para linchar a los gitanos, a los que acusaba de ser responsables de los problemas de droga y delincuencia que se dan en el pueblo. De los 13.800 habitantes de Santa Fe, 2.900 son pertenecen a esa comunidad, según la Policía Local.