Ana Palacio, invitada al Baile de la Ópera
El presidente de Polonia, Alek-sander Kwasniewski; el primer ministro de Croacia, Ivo Sanader, y la ministra española de Exteriores, Ana Palacio, figuran entre los invitados que hoy acudirán al prestigioso Baile de la Ópera, el evento social del año en Viena. Los tres políticos han sido invitados expresamente a sus respectivos palcos por el presidente de Austria, Thomas Klestil; el canciller federal, Wolfgang Schüssel, y la jefa de la diplomacia alpina, Benita Ferrero-Waldner. La ministra española compartirá, sin embargo, el estrecho espacio del palco de Exteriores en la Ópera vienesa con sus colegas de Letonia, Sandra Kalniete, y Croacia, Miomir Zuzul, igualmente invitados por Ferrero-Waldner, que en abril se presenta a las presidenciales austriacas como candidata del Partido Popular. Anteriormente, Ana Palacio habrá celebrado por la mañana conversaciones con su colega austriaca sobre asuntos de interés bilateral y europeo, además de entrevistarse con el director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), el egipcio Mohamed el Baradei. El "baile de los bailes" es un vestigio del pasado de la antigua capital imperial que reúne a la alta sociedad austriaca, desde políticos a empresarios, así como artistas y nobles, y sus invitados internacionales. Entre estos últimos figura la esposa del anterior presidente estadounidense, Hillary Clinton, y la conocida actriz Andie MacDowell, que acudirá a la velada del brazo del magnate austriaco de la construcción Richard Lugner. También han comunicado su presencia el director general de IBM, Ernst Nonhof; el presidente del grupo Siemens, Heinrich von Pierer; el directivo de la firma de automóviles deportivos Wolf-gang Porsche, y el jefe de la petrolera rusa Lukoil, Vladímir Kolosov, entre otros muchos. Con precios astronómicos de 18.000 euros por un palco, agotados a perpetuidad, y de 300 euros por un pase individual sin derecho a silla, las entradas para el Baile de la Ópera están agotadas desde hace meses. Lo mismo sucede con los fraques de alquiler, traje obligatorio para los hombres, mientras que las mujeres acuden a la cita, en la que 300 parejas de jovencitos se presentan en sociedad, vestidas de riguroso largo.-
