Los nuevos estatutos de Caja Navarra limitan a Sanz la presencia gubernamental

El Gobierno foral aprobó ayer los nuevos estatutos de Caja Navarra (CAN), democratización que lleva aparejada la salida de su consejo de todos los miembros del Ejecutivo de UPN, salvo su presidente, Miguel Sanz, quien permanecerá como presidente del máximo órgano de gobierno de la entidad financiera.

El Ministerio de Economía aprobó los nuevos estatutos de CAN mediante una orden la pasada semana. La caja deberá ahora elegir, en seis meses como máximo, su nuevo Consejo General, un órgano de 30 miembros la mitad de los cuales seguirán siendo nombrados por los partidos (ocho representantes por el Ejecutivo autónomo y el Ayuntamiento de Pamplona, cinco por el Parlamento y dos por los municipios con mayor presencia de CAN) y el resto, por entidades no políticas (ocho por entes económicos, sociales y culturales; cinco por los impositores y dos por los trabajadores). El Consejo General elegirá después a los miembros del Consejo de Administración, que presidirá Miguel Sanz, y a la Comisión de Control, que encabezará la alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina.Caja Navarra obtuvo en 2003 un beneficio consolidado neto de 69,6 millones de euros, un 6,4% más que el ejercicio anterior.