Prohibidas las preguntas
Bilbao Metropoli-30, asociación para la revitalización del Bilbao metropolitano organizó el pasado 30 de enero, a las 12 horas, optimo horario para restringir asistencia, un conferencia del gerente del Centro de Investigación Social de Dortmund, el profesor Hans-Werner Franz, con el título Importancia de los valores para el desarrollo estratégico de la cuenca del Ruhr. Esta amplia zona de Alemania ha sido
modélica entre otras cosas, como explicó el ponente, "en la restauración y modernización de las herencias culturales industriales", con la "participación activa de los ciudadanos en la planificación de sus barrios".
Por ser asunto de gran interés, acudí a dicha conferencia, que duró unos 35 minutos. En la presentación del acto el director-gerente de la asociación, Alfonso Martínez Cearra, anunció un coloquio al final. Era evidente que el tema se prestaba a numerosas preguntas y comparaciones. Pues bien, sólo permitió, y de mala gana, que una sola persona hiciera una brevísima pregunta. No quería que hubiese diálogo. Un miembro de la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública pudo coger el micrófono portátil y decir algo. A mí el citado gerente me negó la palabra solicitada desde el inicio, porque decía que ya quería terminar el acto. Y así fue; se levantó y se marchó. Jamás había visto una grosería semejante en una conferencia, y no solo ante los asistentes, que se quedaron asombrados, sino ante el propio conferenciante al que abandonó descortesmente en el estrado. El propio ponente que aludía a la participación social, notó un ambiente de intolerancia y prepotencia y se quedó perplejo.
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