El Gobierno dicta una moratoria para evitar que se construya en 55 kilómetros de litoral

"No pensamos gobernar a cámara lenta". Lo dijo ayer en el Parlament el consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, que comparecía para explicar las líneas de actuación de su departamento. Y a continuación anunció una batería de 17 medidas: desde el rechazo a la construcción de un aeropuerto en Alfés, hasta la protección inmediata de 55 kilómetros de litoral catalán que carecían de la misma, pasando por un nuevo plan de carreteras, medidas contra los accidentes de tráfico y 600 millones de euros para la rehabilitación de barrios con problemas. Hasta la oposición de CiU dijo que el plan tenía cosas buenas. Eso sí, el portavoz convergente, Felip Puig, aseguró que lo bueno ya lo había propuesto su partido.

El proyecto constructivo del túnel de Bracons vulnera la ley catalana y la europea, asegura Joaquim Nadal

Intervención inmediata para eliminar los 158 puntos negros de las carreteras catalanas y reducir la siniestralidad

600 millones de euros para rehabilitar barrios con problemas, centros históricos y polígonos públicos

Una medida de choque: proteger el litoral. La próxima semana, el departamento presentará una propuesta de plan director del litoral destinado a dar protección a los 55 kilómetros de costa que carecen de ella, pero hay una constante presión para ocuparlos. Se declarará protegido todo el suelo no urbanizable que hay junto a la costa en diversos tramos. Algunos ejemplos: en Portbou quedará protegida el área denominada Punta del Pi, Tres platges; en Malgrat, será la zona conocida como Data de la Tordera; en Mataró, la playa de Sant Simó; en Vilanova, Santa Llúcia; en Vila-seca, la playa de la Pineda; en Alcanar, el espacio denominado Maricel.

Contra la especulación

Este proyecto es uno de los que contó con la bendición de CiU. Felip Puig aseguró que de las 17 propuestas hechas por Nadal, 15 eran ya de CiU y estaban en marcha. El secretario de Planificación, Oriol Nel.lo, lo negó de plano. "Tenían cuatro notas en borrador. Nada que ver con lo que presentaremos la semana próxima y que ya veníamos trabajando desde la oposición".

La protección al territorio será uno de los ejes de actuación del nuevo equipo de Política Territorial. Además de proponer el plan director del litoral, Nadal anunció una tasa del 1% sobre las grandes infraestructuras que ocupen terrenos no urbanizables. Este dinero se destinará a la protección del paisaje.

También se planteará la lucha contra la especulación, hasta el punto, anunció Nadal, de que se estudiará un sistema para que las plusvalías que generan las grandes infraestructuras públicas reviertan sobre la colectividad. Hay territorios que se revalúan cuando pasa por ellos una carretera, un metro o una vía ferroviaria. Es injusto que el gasto sea público y el beneficio privado.

Pero para que todo sea claro y transparente, lo primero es definir el marco general, y esto lo tienen que hacer los planes territoriales. En este sentido, el Gobierno quiere empezar por "cumplir las leyes". Nadal se refería a la ley de 1983, que ordenaba al Gobierno elaborar los diversos planes territoriales. 21 años más tarde, seis siguen pendientes. Este Gobierno, aseguró, aprobará los seis que quedan (Alt Pirineu y Aran, Cataluña central, Región metropolitana de Barcelona, Tarragonès y Lleida). Además, se revisarán el plan de las comarcas del Ebro y el general de Cataluña, porque los actuales planes no son operativos.

Primer criterio: colaboración con las instituciones, en especial, los ayuntamientos. Segundo: proteger los espacios abiertos. Tercero: diseñar el trazado y localización de las infraestructuras. Cuarto: determinar las posibilidades de crecimiento. Quinto: ubicar los equipamientos supramunicipales.Los planes "se harán con las administraciones y las entidades del propio territorio", aseguró Nadal, "pero no con su participación". La idea es, añadió luego en respuesta al diputado Josep Llorens (PP), que en el territorio se vea el plan aprobado como verdaderamente se deseaba, aunque es evidente que se trata de armonizar intereses que pueden resultar contrapuestos.

También se pretende racionalizar el territorio gestionando suelo industrial y residencial, pero de modo que la vivienda protegida suponga el 20% del total del techo construido en Cataluña.

Una segunda medida de choque es la que se aplicará en los 40 barrios con problemas de Cataluña. Un plan que incluye una inversión global de 600 millones de euros, dos tercios de los cuales se incluirán en los presupuestos que entrarán en el Parlament en primavera. Esta es una actuación que exige la colaboración directa de los ayuntamientos. Nadal y Nel.lo fueron preguntados por estos barrios, pero aseguraron que su relación no será hecha pública. "Se trata de ayudarlos y no lo haríamos estigmatizándolos desde el principio". El criterio de rehabilitación será triple: físico, con actuaciones sobre edificios y urbanismo; social, con ayudas a sus residentes; económico, con la potenciación de sus estructuras productivas y comerciales. Afectará a barrios antiguos, centros históricos degradados, urbanizaciones poco cuidadas y polígonos públicos desasistidos.

Las intervenciones de los grupos que forman el tripartito fueron todas elogiosas para los proyectos anunciados por Nadal. Sólo Felip Puig expresó sus inquietudes, dijo, por lo que oía, pese a que dominaban, aseguró, las líneas de continuidad respecto a lo hecho por el pasado Ejecutivo. Para descalificar algunas propuestas de Nadal, Puig empleó como elementos de crítica las actuaciones del PSOE cuando estuvo en el Gobierno central.