Los maltratadores llevarán una pulsera electrónica para controlar su alejamiento

"Tolerancia cero con los maltratadores", proclamó Mariano Rajoy en la presentación, ayer en Valencia, de su oferta de ley y orden para ganar las elecciones. Y los populares le aplaudieron. Esa tolerancia cero se traducirá en que este mismo año, si el PP gana las elecciones, todos los condenados por delitos de violencia doméstica que deban mantenerse alejados de su víctima serán obligados a vestir una "pulsera electrónica para los agresores que garantice su alejamiento y localización permanente".

El sistema de pulsera electrónica se ha puesto en práctica en España, de forma voluntaria, entre los reclusos en régimen de tercer grado penitenciario, es decir, de semilibertad, como método para que estén localizados. Además, está en estudio su utilización para garantizar que no se acercan a los estadios de fútbol los condenados por conductas violentas en grandes acontecimientos deportivos.

Rajoy prometió además que "habrá más policías con dedicación exclusiva" a los casos de violencia doméstica. Y que se dedicarán más medios para la "inserción laboral de las víctimas". Y enfatizó que, como medida preventiva, "lo más importante es formar, desde la escuela, en los valores de igualdad, respeto y tolerancia hacia los demás".

Terrorismo

Más incluso que la violencia doméstica, las medidas contra el terrorismo concitan todo el apoyo ciudadano. Ahí Rajoy adelantó pocas medidas pues la clave, según dijo, es "seguir con el mismo empeño y rigor". Y eso significa "eliminar cualquier espacio de impunidad" para el terrorismo en sentido amplio, es decir, el que incluye también a los partidos ilegalizados. Con la tesis de que a "los terroristas sólo se les puede dejar un espacio: la cárcel", Rajoy reiteró que, si gana, modificará todas las leyes que haga falta para luchar contra el ETA "con todo el Estado de derecho".

Junto con la dureza en la lucha antiterrorista, el PP presume de haber trabajado por el reconocimiento social de las víctimas del terrorismo. Con esa bandera, el PP promete la creación, en la Audiencia Nacional, de una oficina central de atención a las víctimas del terrorismo.

Lo de ayer, en todo caso, era un mitin y, como tal, no olvidó una batería de críticas al PSOE. Por ejemplo, Rajoy se burló del programa socialista con el argumento de que él no "se lo ha encargado a una sociedad de consulting", en referencia a la participación de asesores externos. Se mofó también del programa fiscal socialista en estos términos: "¿Cómo se puede decir que no presentarás una alternativa fiscal a la que va a presentar el PP con el argumento de que no tienes datos?". El PSOE ha afirmado que no puede concretar algunas ofertas, como el mínimo exento, los tramos del IRPF o las deducciones, hasta que no "llegue al ordenador de Hacienda".