Las salas pequeñas se agrupan para poder defender sus derechos

No tienen el apoyo de las administraciones, ni del gran público, y sobreviven rozando la ilegalidad. Son los hermanos pobres del teatro. Para hacerse oír, 10 salas pequeñas dedicadas a la escena han decidido agruparse en la Asociación de Nuevos Espacios Escénicos de Madrid (ANEEM). De momento, ya han conseguido que la Asociación de Artistas Intérpretes o Ejecutantes (AIE), auspiciados por el PSOE, colabore con ellos. AIE pondrá en marcha a partir de febrero unos conciertos que tendrán como escenario esas diez salas.

Los agrupados en la nueva asociación son Teatro Lagrada, Espada de Madera, Guindalera Escena Abierta, Ítaca Teatro, Teatro Estudio Liberarte, Replika Teatro, Tribueñe, Karpas Teatro, La Nave de los Locos y el Teatro Independiente del Sur (TIS). Esta última sala, que abrió el año pasado, está amenazada desde noviembre pasado con una orden de cierre, ya que carece de licencia. El Ayuntamiento exigió a TIS unas obras para obtener los papeles necesarios, tras la denuncia de una vecina que se quejó de los ruidos. Su propietaria, Mari Carmen Benítez, explicó ayer que carecen de presupuesto para acometer las obras. "No tenemos licencia porque no tenemos dinero para terminar los arreglos que nos piden: una puerta, un escalón, un tabique...", relató Benítez.

La situación del resto de salas es parecida: o carecen de licencia o funcionan como una asociación cultural. Como no tienen el permiso municipal, sobreviven sin subvenciones oficiales. Los empresarios se quejan de que la normativa que se les aplica es demasiado estricta. "No nos pueden pedir lo mismo que a los grandes teatros. Además, con 12.000 euros de subvención por sala podríamos sobrevivir", explicaron ayer varios responsables de estos escenarios.

La Asociación de Artistas Intérpretes o Ejecutantes (AIE), que dirige Luis Cobos, ha incluido a estos espacios dentro de sus circuitos musicales. Así, albergarán a partir de febrero los ciclos de la AIE Artistas en rutay Clásicos en ruta, formado por intérpretes muy jóvenes de música clásica.

Este encuentro entre la AIE y los teatros pequeños ha sido promovido por el grupo municipal socialista. "Nuestra labor en la oposición no consiste sólo en vigilar al gobierno, sino también en tomar iniciativas", aseguró la edil socialista Rosa León. "Inexplicablemente, falta apoyo para estas salas. Son espacios fundamentales para la creación artística y la investigación escénica", señaló Trinidad Jiménez. Para la portavoz socialista, las salas alternativas tienen una labor social, "ya que se integran en los barrios donde desarrollan su trabajo. Son una especie a proteger".

Además del encuentro de ayer, el pasado 2 de diciembre se reunieron responsables de la Concejalía de Artes con empresarios de seis salas. De la reunión surgió la propuesta de crear una ventanilla única como solución para evitar el cierre de las salas de teatro en la ciudad. "No quiero entrar en la normativa decimonónica del Ayuntamiento. Sólo quiero que dejen de ponernos la zancadilla", concluyó Teresa Valentín, de Escena Guindalera Abierta, en la presentación de la nueva asociación.