"La Tamborrada es la mejor empresa pública"

El escritor Félix Maraña (San Sebastian, 1953) cree que "la historia emocional y sentimental de San Sebastián está por escribir". Esa es la razón que le ha llevado a redactar Perfiles de la Tamborrada Donostiarra (1836-1936), un texto incluido en Rataplán, el libro-guía publicado por tercer año por la editorial Zum-Donosti Aisia, que recoge todos los datos prácticos de los desfiles que invadirán las calles donostiarras durante las 24 horas del martes para celebrar la fiesta de la ciudad.

Pregunta. ¿Qué cuenta Perfiles...?

Respuesta. He hecho un perfil histórico, es decir, revisar todo el conjunto de variables que en el tiempo han ido diciendo qué era la Tamborrada.

P. Existen diversas versiones sobre su origen. ¿Con cuál se queda?

R. En primer lugar hay que decir que la festividad no existiría si en 1597 la peste no hubiera asolado San Sebastián. La ciudad se encomendó entonces a un tal San Sebastián.

P. ¿Y después cómo surgió la Tamborrada?

R. Yo me quedo sobre todo con la versión que sitúa sus inicios en torno a 1836 y apunta a las sociedades populares y a los diferentes gremios como los impulsores de la fiesta. Lo que sí está claro es que esos primeros desfiles son parodias de los desfiles militares que los donostiarras presenciaban a finales del siglo XVIII y principios del XIX. En 1861, cuando se presenta la marcha de San Sebastián del compositor Raimundo Sarriegui, arranca la manifestación global de las tamborradas.

P. ¿Qué ha propiciado que la fiesta perdure?

R. Sarriegui es su esqueleto sentimental. Su música cala profundamente en la sociedad. Y las sociedades populares, su esqueleto material. Un hito fue la incorporación en 1927 de los niños, que tienen así el veneno de la fiesta desde pequeños.

P. Las chicas de la sociedad Kresala fueron las primeras mujeres que tocaron en la Tamborrada. ¿Cómo recuerda su incorporación ?

R. Si no se hubieran sumado en 1980, siendo alcalde Jesús María Alkain, un hombre de paz y entendimiento, no hubieran podido hacerlo en 1983, porque el alcalde era Ramón Labayen y no les hubiera dejado.

P. Las féminas se han ido integrando en diferentes compañías sin mayores problemas. ¿Por qué no ocurre igual en Hondarribia e Irún?

R. Quizá porque ninguno de los dos ayuntamientos ha tenido un alcalde como Alkain. Ninguna institución pública ha tenido los arrestos de tomar posición en favor de los derechos humanos.

P. ¿La tamborrada es un elemento de cohesión entre los donostiarras?

R. Sí, sí. Es la mejor empresa pública de San Sebastián. Y no creo que el Ayuntamiento, no digo este alcalde ni el otro, haya concebido claramente lo qué significa para la vida cotidiana, pública e incluso política de la ciudad.