Se impone la cautela

La Bolsa española finalizó con una mínima subida, en una jornada marcada por la falta de datos económicos importantes. El Ibex 35 sumó un 0,14% en su indicador, quedó en 7.946,10 puntos, y en algunos momentos llegó a superar la fuerte resistencia de los 8.000 puntos.

A lo largo de todo el día, las bolsas europeas se apoyaron principalmente en el buen comportamiento del Nasdaq en la jornada del lunes, que se encuentra en máximos de hace dos años y medio. No obstante, la apertura negativa de Wall Street frenó las subidas, por lo que el resultado final fueron mínimas ganancias para los índices. Francfort con un 0,01% y París que se alzó un 0,45%. La Bolsa de Londres perdió en solitario un 0,21%.

Muchos analistas consideran que las bolsas han subido mucho, y muy deprisa, por lo que llegado a determinados niveles los precios dan cierto vértigo y las tomas de beneficios parece lo más apropiado. Ahora, se impone la prudencia y cierto compás de espera en los precios actuales, para poder seguir superando nuevos máximos en los índices. El fondo es bueno, nadie quiere estar fuera de la renta variable, pero tampoco hay que agotar todos los movimientos en el corto plazo.

En la jornada de ayer, valores como Iberia y Repsol acapararon la atención. La petrolera se anotó una subida del 1,03%, animada por algunas casas de análisis que recomiendan comprar acciones de la compañía.

El volumen de negocio fue de 4.079 millones de euros, uno de los más altos de la historia, de los cuales más de 1.000 millones correspondieron a una operación especial en Repsol.

El euro perdió parte de terreno en el mercado de divisas, después de los máximos históricos alcanzados el pasado lunes. El Banco Central Europeo fijó un cambio oficial en 1,2749 dólares y por la tarde la moneda única se cambiaba a 1,2743 unidades. En deuda, la rentabilidad de los bonos a 10 años cerró en el 4,13%, con una subida de tres centésimas respecto a la jornad

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