Urdangarin da un nuevo paso hacia la presidencia del Comité Olímpico Español

Iñaki Urdangarin dio ayer un nuevo paso hacia la presidencia del Comité Olímpico Español (COE), el futuro que se le preveía cuando ingresó el 4 de abril de 2001 en el organismo tras retirarse del balonmano. En su primera oportunidad, el presidente puente del COE, José María Echevarría, le ha propuesto para ocupar la vicepresidencia primera, vacante al renunciar el ex secretario de Estado para el Deporte, Santiago Fisas, que aceptó ser consejero de Cultura y Deportes de la Comunidad de Madrid con su amiga Esperanza Aguirre.

La comisión ejecutiva del COE se reunió ayer para decidir la fecha de la próxima asamblea general en la que se hará oficial el nombramiento. Será el 16 de febrero, y en ella también se deberá abordar un asunto de fondo mucho más importante, la reforma de los estatutos y del sistema de votos de los miembros. Las 28 federaciones olímpicas no han tolerado más el absurdo de no tener mayoría -como dice la Carta Olímpica, además-, frente a las no olímpicas, algunas con tan escaso peso específico como galgos, colombicultura o colombofilia, y frente a la suma restante del variopinto mundo de miembros del COE, ex deportistas, ex dirigentes y representantes de instituciones. Las federaciones olímpicas suman ahora 140 votos por 141 del resto y el nuevo sistema que proponen, con 4 votos para ellas y uno para los restantes miembros y federaciones, les llevaría a tener la mayoría, el 54,6%. Sin embargo, el asunto aún no está cerrado, pues las no olímpicas aún no se resignan a tener un solo voto -tenían tres las reconocidas por el COI y dos las que ni siquiera lo están-. Y puede haber guerra.

Pero la realidad es que las federaciones olímpicas, ante su vacío de protagonismo en el COE, se han hecho más fuertes y han creado incluso una Confederación que consolida sus reuniones mensuales desde los Juegos de Atlanta 96. Han querido estar en primera línea, conocer más datos económicos y planes, y no ser sólo simples usuarios de la agencia de viajes en que siempre acaba convirtiéndose el COE para cada edición. Alejandro Blanco, mandatario del yudo, e impulsor clave, es el primer presidente, con vicepresidentes de deportes fuertes, como José María Odriozola, de atletismo, y Ángel María Villar, de fútbol, pese a que no irá a los próximos Juegos. De cara a Atenas, ahora también les prepocupa cómo les afectará el resultado de las elecciones de marzo. "Porque faltan siete meses y volveremos a ser los primeros responsables de los resultados", dice Blanco.