Pospuesta la integración de policías nacionales en las Bescam

El Cuerpo Nacional de Policía no se integrará en las Brigadas Especiales de Seguridad Ciudadana de la Comunidad de Madrid, al menos, hasta después de las elecciones generales de marzo. Así lo anunció ayer Alfredo Prada, vicepresidente segundo y consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid. "No sería oportuno integrarla antes de los comicios", precisó. Sin embargo, Prada dijo que la primera base operativa de la unidad policial de nueva creación, entrará en actividad en la localidad de Móstoles el 1 de marzo con sesenta integrantes, instruidos en un curso de 125 horas lectivas, "perfectamente equipados con vehículos nuevos, motos, automóviles y un helicóptero".

Prada había acudido a la sede de la Federacion de Servicios Públicos de la Unión General de Trabajadores, UGT, con cuyo secretario general, Manuel Sánchez, se reunió por la mañana durante dos horas. En la entrevista, el vicepresidente segundo del Gobierno regional informó a su interlocutor sindical -el cuarto con el que se entrevista- del alcance de la iniciativa, de una de las propuestas de mayor calado político y de imagen del programa de Gobierno que prometió la presidenta regional, Esperanza Aguirre, en las recientes elecciones.

Mandos policiales

Descartados los 3.000 miembros de la Policía Nacional inicialmente previstos, en una primera fase el proyecto de las Brigadas Especiales de Seguridad Ciudadana de la Comunidad de Madrid incorporará 2.500 agentes, distribuidos en 30 bases operativas de otros tantos municipios de la región con más de 25.000 habitantes, según informó Alfredo Prada. "Los ayuntamientos financiarán los mandos del nuevo cuerpo y poseerán la responsabilidad de las decisiones operativas, pero será el Gobierno regional el que pague las Bescam y quien ejerza su coordinación".

El consejero anunció, asimismo, que hoy propondrá al Consejo de Gobierno regional un plan de desarrollo de la financiación de las Bescam, uno de los aspectos -con el de personal, el de la responsabilidad jurídica y la coordinación de una entidad tan amplia- más problemáticos de la iniciativa, según fuentes del sindicato UGT, cuyo dirigente y diputado autonómico, Manuel Sánchez, se dio por informado del proyecto. Sin embargo, matizó que el modelo policial que preconiza su sindicato "es integral y, en principio, reacio a la proliferación de distintas entidades policiales". Sin embargo, Sánchez -que prevé muchos problemas en la aplicación de esta iniciativa- anunció que si el Gobierno decide hacerlo viable "UGT colaborará en impedir que sea un desastre". Su sindicato cuenta con una afiliación de más de 600 miembros en el sector de las policías municipales, donde el incremento de miembros del nuevo servicio puede devaluar a los agentes locales, según Sánchez, que remarcó que, en el nuevo esquema, el papel de la Delegación del Gobierno "no queda claro".