Nissan advierte de que su planta británica no fabricará el nuevo Almera si el Reino Unido no adopta el euro

El grupo automovilístico japonés Nissan estudia renunciar a fabricar el nuevo modelo Almera en su planta británica de Sunderland si el Reino Unido sigue sin adoptar el euro como moneda, según advierte el presidente de la compañía, Carlos Ghosn, en diversas informaciones publicadas ayer por la prensa británica.

"¿Cómo puedes fabricar coches en un país en el que la divisa es diferente de la moneda de los países en los que se venden esos coches? No es sostenible a largo plazo", aseguró Ghosn el martes pasado en el Salón del Automóvil de Detroit (Estados Unidos) en declaraciones recogidas por el periódico Daily Telegraph.

La fábrica de Sunderland (norte de Inglaterra) produce los modelos Primera, Micra y Almera. Ahora la compañía japonesa tiene que decidir dónde construirá, a partir de 2005, el nuevo Almera. Sunderland es candidata, pero Nissan podría optar finalmente por fabricar el modelo en la planta del grupo francés Renault en Douai (norte de Francia). Renault posee un 44% del capital de Nissan.

"Si el Reino Unido adopta el euro, la decisión sobre el Almera estará clara, ya que la fábrica de Sunderland funciona bien", añadió Ghosn. Esta fábrica fue elegida como la más productiva de Europa en 2002, por séptimo año consecutivo, según un estudio anual elaborado por el Centro de Investigación de los Mercados Mundiales.

No es la primera vez que Nissan pide a Londres que sustituya la libra esterlina por el euro. En el verano de 2000, el grupo ya advirtió del riesgo que asumía el Gobierno de Tony Blair si no adoptaba la moneda única. Poco después también lo hizo la japonesa Matsushita. El primer fabricante mundial de productos electrónicos, propietario de marcas como Panasonic, amenazó con cerrar sus fábricas en el Reino Unido si la libra no se integraba en el euro. En julio de 2000, un informe de la Oficina de Inversiones británica concluía que la industria británica sufrirá un fuerte retroceso y se perderán miles de empleos a menos que el Gobierno se dé cuenta de que es "indispensable" que el Reino Unido acceda pronto a la moneda única europea.