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Pla exige a Camps explicaciones inmediatas en las Cortes sobre las finanzas de la Generalitat

El PP sostiene que el último informe del Síndic de Comptes avala la gestión del Consell

Joan Ignasi Pla, secretario general del PSPV, exigió ayer la inmediata comparecencia de Francisco Camps, presidente de la Generalitat, ante la Diputación Permanente de las Cortes Valencianas, para explicar de forma "clara y concisa" la situación "grave, extraordinaria y difícil" de las arcas autonómicas que, según los socialistas, refleja el último informe de la Sindicatura de Comptes sobre la gestión financiera del Consell en el ejercicio 2002. Serafín Castellano, portavoz parlamentario del PP, rechazó la invitación y negó el carácter "extraordinario" del informe.

Pla, al término de una reunión del Grupo Socialista, subrayó tres aspectos que derivan del análisis del informe del Síndic: "Un colegio cuesta el doble de lo que tenía que haber costado; un proyecto emblemático como la Ciudad de las Artes y las Ciencias costaba en 2002 el doble de lo presupuestado inicialmente; un nombrado a dedo gestiona 300.000 euros sin tener que rendir cuentas a nadie". Y exigió al presidente de la Generalitat; los consejeros afectados; y los directores de las empresas públicas Ciegsa, dedicada a construir infraestructuras escolares; CACSA, promotora de la Ciudad de las Artes y las Ciencias; y Sociedad Parque Temático de Alicante, instrumental para el impulso de Terra Mítica y otros proyectos emblemáticos, que ofrezcan explicaciones de inmediato ante las Cortes sobre las advertencias del Síndic.

Pla concluyó que el informe del Síndic revela "una mala gestión de los dineros de todos los valencianos" que repercute en la escasa disponibilidad de fondos para acciones que afectan los ciudadanos y clamó: "Alguien tiene que gobernar". Los socialistas, recordó Pla, propusieron acordar un plan de saneamiento de las finanzas de la Generalitat "hace seis meses", cuando Camps asumió la presidencia. Y solicitaron la convocatoria de la Diputación Permanente, órgano que suple al pleno en periodos de vacaciones parlamentarias, el pasado 2 de enero ante la gravedad de las advertencias del Síndic. Pero la solicitud ni siquiera se ha tramitado porque el "presidente de las Cortes sigue de vacaciones", ironizó el dirigente socialista. Ayer, Pla aludió a una vía recogida en el Estatuto de Autonomía como último recurso posible para exigir la inmediata comparecencia de Camps si el presidente rechaza la opción "más razonable".

La respuesta del PP fue automática. Serafín Castellano, portavoz del Grupo Popular, negó "la excepcionalidad" que los socialistas atribuyen a la situación financiera de la Generalitat y afirmó que "el informe de la Sindicatura dice que las cuentas del Consell son correctas y acordes a la legislación presupuestaria y contable vigente". Según Castellano, la comparecencia ordinaria del Síndic ante la comisión correspondiente ofrece espacio más que suficiente para debatir la cuestión.

Los socialistas también solicitaron que la inminente campaña para las elecciones generales no interfiera en el calendario de las Cortes, cuya actividad ordinaria arrancará a mediados de febrero. El PP asumió con largueza la propuesta: "No va a haber ningún problema y seguro que llegamos a un acuerdo para establecer un calendario lo más dinámico y fructífero posible". Castellano dudó incluso de la capacidad de los socialistas para "resistir" el ritmo que pretende imponer el PP a la actividad parlamentaria.

Fracaso del PHN

Sobre el anuncio de la responsable federal de Medio Ambiente, Cristina Narbona, que el PSOE paralizará el trasvase del Ebro si gana las elecciones generales, Joan Ignasi Pla afirmó que aún no conoce la propuesta, pendiente de aprobación definitiva, pero subrayó que los socialistas valencianos coinciden "en casi todo" con la dirección del partido, y fundamentalmente en que "el PHN es un fracaso desde el punto de vista de su efectiva realización por las cada vez mayores contradicciones y dificultades territoriales". No obstante, el secretario general dijo que los socialistas valencianos defienden una "nueva cultura del agua" sin renunciar "en ningún caso, a la aportación externa entre cuencas". El PSPV aboga por llevar agua del Ebro a Castellón por el canal Xerta-Càlig, entre otras medidas. Pla se reunirá próximamente con los presidentes socialistas de Cataluña, Pasqual Maragall, y de Aragón, Marcelino Aragonés, ambos contrarios al trasvase del Ebro.

Mientras, Rafael Ferrando, presidente de la Confederación Empresarial Valenciana, reiteró que la solución al problema del agua está en el PHN y pidió un esfuerzo "de solidaridad" y "no convertir un asunto vital" para el progreso económico y social "en un arma arrojadiza en tiempos preelectorales". Joan Brusca, secretario general de la Unió de Llauradors, también aludió al uso del PHN "como arma electoral" y exigió de nuevo "agua suficiente, de calidad y a un precio asequible".

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