Partidos y entidades cívicas de la Vega Baja piden soterrar el AVE

Las disensiones que provocó el trazado del AVE a su paso por la Vega Baja se han cerrado. La última solución que ha propuesto el Ministerio de Fomento -el corredor centro- ha tenido la virtud de unificar posiciones entre los partidos políticos y colectivos sociales de todos los municipios de la comarca. Ahora nadie duda de que ésta es la mejor alternativa, pero con correcciones. El soterramiento integral es la petición más reiterada.

La adaptación de la vía tradicional del tren a las necesidades del AVE que plantea Fomento no ha sido acogida en la comarca de la Vega Baja con el entusiasmo que se preveía. El primer alcalde que manifestó públicamente sus recelos sobre los perjuicios medioambientales que esta traza podía acarrear fue el de Orihuela, José Manuel Medina, del PP, que aunció su propósito de alegar para que los raíles fueran bajo tierra por su municipio.

La reivindicación no ha tardado en extenderse a otros municipios y colectivos sociales de la comarca, que han secundado esta posición e incluso han complementado la demanda con otros planteamientos mucho más ambiciosos.

La plataforma No Así, que aglutina a diferentes entidades políticas y sociales, propuso unos días más tarde que el tren se soterrase por toda la Vega Baja. La propuesta fue recibida con complacencia por parte de otros dirigentes políticos, como el regidor de Callosa, también del PP, que se apresuró a concertar una entrevista con los tres partidos de la oposición para aunar opiniones sobre el AVE.

Fruto de esta conversación fue un pronunciamiento compartido en el que exigían que el tren se soterrase a la entrada y a la salida del municipio. En este tramo, el AVE se aleja, según el estudio informativo del Gobierno, de la vía convencional hacia el extremo opuesto de la ciudad, adentrándose a través de un túnel por la sierra de Callosa y Cox, en cuyas inmediaciones se situaría una nueva estación. El trazado por este término provocó en un primer momento la euforia del PP, ya que permitía eliminar los raíles que hasta ahora constreñían el crecimiento del casco urbano, pero un día después de que No Así hablara de soterrar la vía desde Callosa, el gobierno local se adhirió a estos argumentos.

Municipios como San Isidro o Redován, que parecían indulgentes con el trazado del AVE, no han querido mantenerse al margen de la controversia y se han sumado a la ola dominante, reclamando igualmente que se soterre la plataforma del AVE por sus respectivos términos. Otros colectivos, como los comerciantes de Orihuela o el tejido empresarial, han expresado la misma convicción de que es necesario soterrar toda la traza por la comarca, por las numerosas afecciones que ocasionaría sobre el casco urbano de Orihuela y las partidas rurales. "Las pedanías de la Media Legua o Lo Cabello quedarían destrozadas con esta solución", dijo el jueves el presidente de los comerciantes de Orihuela, Alejando Alfonso, "llevándose casas por delante y partiendo en dos al pueblo".

Idéntica opinión expresó el jueves por la noche el presidente de la Cámara de Comercio, Juan Cerdán, en un acto convocado por el ente cameral para aclarar a la ciudadanía las consecuencias medioambientales que la variante constructiva actual del AVE conllevaría para esta ciudad. En la reunión, que congregó a centenares de vecinos, dos técnicos explicaron las afecciones más significativas del último trazado propuesto por Fomemnot y mostraron imágenes virtuales sobre el aspecto que presentarían los enclaves que resultarían más dañados de materializarse esa opción.

Al término de la exposición, se recabaron firmas para presentar alegaciones contra esta alternativa. Las sugerencias manifestadas van en la misma línea que las planteadas por diversos grupos políticos y cívicos de la Vega Baja, es decir, el soterramiento integral de las vías.