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El fiscal pide 4 años de cárcel para una mujer que vendió un falso 'chagall'

La acusada lleva un año en la cárcel

La Fiscalía de Madrid solicita cuatro años de cárcel para Liana Jikia por vender supuestamente como auténtico un falso cuadro del pintor franco-ruso Marc Chagall. Jikia engañó supuestamente al ciudadano español Rafael V. E. M. y le pidió en torno a 400.000 euros por la obra de Chagall El hombre con la cabeza torcida. Pero la policía actuó antes y la mujer lleva un año en la cárcel.

La acusada, de 56 años y de nacionalidad georgiana, será juzgada hoy en la Sección Segunda de la Audiencia de Madrid. En la actualidad se halla en prisión por este delito. Según el escrito de acusación provisional del fiscal, la acusada, "de ignorados antecedentes penales y con la finalidad de obtener un beneficio patrimonial ilícito", contactó en junio de 2002 con el ciudadano español Rafael V. El encuentro se produjo en la República de Georgia, adonde Rafael se había desplazado por motivos laborales.

Allí, Jikia le ofreció en venta el citado cuadro de Chagall. Dijo que la obra le pertenecía y que estaba dispuesta a vendérsela por 400.000 dólares. Rafael V. aceptó la oferta. "A los efectos de consumar el engaño", describe el fiscal, la acusada, "con fecha 6 de junio de 2002, otorgó un acta notarial mediante la que donaba dicho cuadro a favor de un amigo" del empresario español llamado Román M., ajeno a toda esta trama, según el fiscal. Lo hizo así en la creencia de que éste podría traer el cuadro a España con más facilidad y entregarlo a su amigo. Rafael V. entregó en ese momento a la acusada 42.000 euros en concepto de fianza por la adquisición del lienzo.

El acuerdo fue que el resto del dinero se lo entregaría a Jikia una vez se cotejase que la obra era auténtica y se eliminasen todos los obstáculos para la importación del cuadro a España sin que pusieran pegas los funcionarios de la aduana española y las autoridades de Georgia. Finalmente, el cuadro viajó a España en diciembre de 2002. Ante un notario de Torrelodones, el empresario y uno de sus socios, F. J. R., otorgaron una escritura pública en la que ambos entregaban a la acusada la cantidad de 114.000 dólares como parte del precio de la obra. A la firma de la escritura acudieron también la acusada y el citado amigo de Rafael V. La entrega del resto del dinero quedaba supeditada a que el Comité Marc Chagall, ubicado en París, se llevase la obra y emitiese un dictamen sobre su autenticidad.

En diciembre de 2002, este comité dictaminó que la obra era falsa: se trataba de una copia hecha del cuadro en 1980. Al ver que el cuadro no era auténtico, la policía detuvo a Jikia por supuesta estafa y la condujo ante un juez, que ordenó su ingreso en prisión el 30 de diciembre de 2002, hace ahora casi un año.

Considera el fiscal que los hechos son constitutivos de un delito de estafa de los artículos 248, 249 y 250 del Código Penal. Además de los cuatro años de cárcel, el fiscal exige que se imponga a la acusada una multa, a razón de 90 euros diarios durante diez meses. También demanda que la acusada abone a Rafael V. y a su amigo F. J. R. la cantidad de 156.800 euros, además del interés legal de este dinero mientras ha estado en manos de la acusada. Éste es el dinero total entregado a Jikia por el empresario y su socio.

Escuela de París

Marc Chagall pertenece a la Escuela de París. Estudió en San Petersburgo con León Bakst y en 1910 se instaló en Francia. En sus obras conviven el empleo del color puro, propio del fauvismo, y la forma de descomponer el espacio, derivada del cubismo.

Los temas predilectos de Chagall son las fiestas populares, los músicos y las narraciones bíblicas. Tras la Revolución de 1917, regresa a su país, donde es nombrado comisario de Artes de Vitebsk y director de la Academia de Bellas Artes. Por disidencias internas, parte en 1922 a Berlín, y en 1923 se establece en París. Durante la ocupación alemana, en 1941, Chagall se refugia en Estados Unidos. Pero vuelve a Francia.

Dentro del repertorio de Marc Chagall, el tema de los enamorados alcanza notable desarrollo. Aparece a partir del casamiento con Bella, en 1915: su vida en común inspira estas imágenes, donde el vuelo de los amantes simboliza la fuerza que impulsa a los enamorados. La levitación de las figuras da a la composición un carácter fantástico. A partir de la década de los cincuenta, el color se renueva en su obra y adquiere primacía el azul. En Los amantes, las figuras del primer plano aparecen incompletas, recortadas.

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