Parodias

En un artículo publicado en Carta de Ajuste (boletín de la Academia de las Ciencias y las Artes de la Televisión), Carlos M. Arnanz cuenta que, cuando en Francia se implantaron las 35 horas semanales, una de las primeras consecuencias fue el aumento del consumo de televisión.

Utopía

La utópica reducción de la jornada por la que lucharon los sindicatos apelaba al tiempo de ocio como una oportunidad para el descanso, la cultura y la mejora de las relaciones personales. Luego resulta que, cuando te dan cinco horas más de tiempo libre, las inviertes en televisión. La misma revista incluye un artículo de Pilar Zamora, directora de programas de Gestmusic-Endemol, en el que opina sobre la telebasura en unos términos ideales para debatir apasionadamente. Una muestra: "¿Es éticamente mejor querer ser Beckham que aspirar a ser Bisbal?".

De cine

Abundan los programas con invitados famosos sólo por salir en la tele y con poco que contar. Por eso fue un placer que el programa Una altra cosa, que Andreu Buenafuente presenta en TV-3 (con parodia de Letizia Ortiz incluida), invitara a Antonio Gasset, director de Días de cine. Gasset pidió que le subieran el sueldo, un deseo con el que muchos espectadores se identifican, y practicó el inusual arte de la mordacidad en un tono escéptico-melancólico, huyendo de la ubicua estridencia del medio. Cuando Buenafuente le preguntó por qué los críticos odian tanto la televisión, Gasset respondió si no será porque la tele es odiosa. Andreu fue injusto: al mejor crítico de España, de La Vanguardia, la tele le encanta incluso más que a muchos que la hacen.

Vampiros

De El Terrat, la misma productora de Una altra cosa (y ganadora de un Ondas por Me lo dices o me lo cuentas), se estrenó Homo zapping (Antena 3). Es una parodia de los espacios de zapeo, sucesión de imágenes deformadas con intención caricaturesca (desde Aquí hay tomate a 24, pasando por Telecupón, Día a día, Documentos TV y otros). La vampirización produce una extraña simetría. Siendo los contenidos de Homo zapping de producción propia, se alimentan de la materia prima de otras cadenas, las cuales, a su vez, se aprovecharán de las parodias para nutrir sus antologías y resúmenes. Se agradece que la parodia empiece por la propia cadena y un despliegue de producción, interpretación (la imitación de Carmen Alcayde fue extraordinaria) e ideas que ya vimos en La última noche (Tele 5) y que El Terrat explota semanalmente en Una altra cosa. Como en los auténticos programas de zapeo, el nivel es desigual (mejor Estrenos de cartelera que Redes) y el hilo conductor, esbozado a través de las tribulaciones de sofá de dos vecinos, José Corbacho y Esther Arroyo, no pasó de ser, en la primera entrega, un recurso soso y meramente funcional.