La comisión de obras del 'túnel de la risa' lleva dos meses sin reunirse
La oposición culpa al Ayuntamiento de la paralización de los encuentros entre los técnicos
Los técnicos del Ayuntamiento, la Comunidad y el Ministerio de Fomento llevan dos meses sin reunirse para vigilar conjuntamente los trabajos del nuevo túnel ferroviario Atocha-Chamartín. El pasado julio se creó una comisión técnica, formada por representantes de las tres administraciones, "para hacer un seguimiento de los trabajos y evitar problemas a los ciudadanos", según anunció entonces el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón. La oposición municipal achaca la ausencia de reuniones al "desinterés del Ayuntamiento" en una obra que pondrá el centro de Madrid patas arriba durante 30 meses.
PSOE e IU dicen que Fomento desoye a Ayuntamiento y Comunidad
La comisión técnica de seguimiento de las obras del nuevo túnel Atocha-Chamartín, integrada por técnicos del Ayuntamiento, la Comunidad y el Ministerio de Fomento, se disolvió hace dos meses por un desacuerdo entre las partes implicadas sobre cómo realizar los trabajos del túnel, según fuentes relacionadas con la obra.
El Ayuntamiento no da ninguna explicación oficial y remite al Ministerio de Fomento, porque "es el responsable de la obra". Fuentes de la Comunidad aseguran que el ministerio se ha puesto en contacto con sus técnicos, también presentes en la comisión, para reanudar las reuniones en una fecha aún por determinar.
La historia de la comisión técnica encargada de vigilar los trabajos del túnel es la sucesión de una serie de contradicciones y rectificaciones. Por ejemplo, el pasado 9 de julio, el Consistorio anunció la creación de dos comisiones encargadas de un seguimiento continuo de los trabajos del nuevo túnel de la risa, que servirá para enlazar las estaciones de Atocha y Chamartín.
Una de ellas sería una comisión ciudadana encargada de establecer cauces de comunicación entre el Ministerio de Fomento, responsable de las obras, y los vecinos afectados por los trabajos. La otra comisión estaría integrada por técnicos del Ayuntamiento, la Comunidad y Fomento.
Hace dos semanas el Ayuntamiento aseguró que esa comisión no existía. "Sólo hay una comisión encargada de seguir los trabajos, y ésa es la ciudadana. No hay técnicos del Ayuntamiento en ninguna comisión", aseguraron los portavoces del Consistorio. Pero la semana pasada, los portavoces del gobierno municipal rectificaron y aseguraron que la comisión técnica seguía en marcha y que los representantes del Ayuntamiento en ella son Fernando Autrán, alto cargo de la Concejalía de Seguridad y Servicios al Ciudadano, y José Ignacio Iturbe, gerente de la Empresa Municipal de Transportes (EMT).
La información del ministerio sobre este tema tampoco aclara si ha habido o no reuniones de la comisión técnica recientemente. Ante las críticas de la oposición sobre la falta de información sobre el estado de las obras, Fomento dice: "No se ha ocultado nada. Desde el pasado mes de julio viene reuniéndose una comisión de participación ciudadana en la que técnicos de este ministerio informan a vecinos y comerciantes de las incidencias de las obras. La última reunión se celebró el 11 de noviembre". El comunicado del ministerio se refiere sólo a la comisión ciudadana, pero no dice nada de los encuentros anunciados en julio entre técnicos del Ayuntamiento, la Comunidad y el ministerio.
Fuentes relacionadas con los trabajos aseguran que la comisión técnica no se reúne desde hace dos meses por las divergencias entre las partes implicadas sobre cómo realizar los trabajos de excavación del túnel. El proyecto original de Fomento era excavar desde Atocha y Chamartín para unir ambos puntos. Aconsejado por técnicos municipales y algunas de las constructoras que proponían hacer un solo agujero, Fomento decidió, según estas mismas fuentes, cavar sólo desde Chamartín. Pero como eso suponía indemnizar a la empresa Dragados, adjudicataria de las obras en la glorieta de Carlos V, el ministerio decidió volver a la idea inicial y construir el túnel haciendo dos enormes agujeros en la capital. Esta marcha atrás, según estas fuentes, es la razón de que se rompiera la comisión técnica.
La portavoz municipal de Izquierda Unida, Inés Sabanés, protesta porque considera que "el Ayuntamiento no puede con Fomento". "Todas las alegaciones y sugerencias de la Comunidad y el Ayuntamiento han caído en saco roto", dice Sabanés.
La representante en el Ayuntamiento del PSOE, Trinidad Jiménez, coincide con la crítica: "Seguimos exigiendo la creación de un plan director para las obras y la movilidad ciudadana. Tienen que saber que no vamos a dejar pasar el tema ni nos vamos a olvidar".
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