El tren de los currantes
Hay cinco estaciones de Cercanías entre Atocha y Pinto (línea C-3). Una de ellas se llama Getafe Industrial; otra, San Cristóbal Industrial, y otra es el polígono de El Casar. ¿Queda todavía alguna duda sobre quiénes son los usuarios de esta línea?
En la hora punta se agolpan los bolsos y las mochilas sobre el piso del tren. El pasado martes, Ricardo Bellido, operario de 23 años en una fábrica de El Casar, dejó caer su bolsa deportiva con estrépito, resopló y se sentó en el único sitio libre. Mala decisión. Bellido se ganó la reprimenda de dos jubilados y parte de los viajeros, que esperaban el sitio desde tres estaciones atrás. Unos 43.500 viajeros hacen este tramo a diario, y en hora punta la cifra alcanza los 12.600.
Sin embargo, el paisaje difiere, y cómo, en la misma ruta, pero dentro de un tren Civis. Estos ferrocarriles rápidos -que no hacen paradas intermedias en los polígonos industriales y marchan directos de Pinto a Madrid- van igual de abarrotados, pero sus ocupantes son en su mayoría estudiantes y profesionales de los servicios.
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