Campano aleja al Mallorca de la zona de descenso

El Mallorca aprovechó la gran noche de su extremo derecho, Alejandro Campano, para vencer al Betis en un partido que pudo caer fácilmente de ambos lados. Las imprecisiones defensivas del Mallorca se sucedieron sin descanso durante la primera mitad, para desesperación de Luis Aragonés y enfado de la grada, que temblaba cada vez que Joaquín hacía de las suyas, primero por la banda derecha, después por la izquierda. Pero en este terreno abonado para un Betis que había salido a ganar, los locales encontraron hueco por el carril izquierdo, desde donde Nené puso un balón privilegiado a Campano, que resolvió a la primera con un toque sutil.

El Mallorca hacía buena la sabiduría popular que avisa de que, quien perdona, lo acaba pagando. El Betis, no obstante, supo devolver el golpe antes del intermedio: Joaquín entró hasta la cocina por la izquierda para dejar que Palermo, con la ayuda involuntaria de Niño, empatara el partido. Y vuelta a empezar.

La lógica del frontón se impuso en el segundo tiempo, que fue de ida y vuelta: desapareció el juego en el mediocampo para que el partido ganara en brillo y suspense. Y apareció otra vez Campano. El jugador nacido en Sevilla, que ya marcó esta semana ante el Copenhague en la Copa de la UEFA, se sacó de la manga un fenomenal trallazo para dar los tres puntos al Mallorca, que se aleja de las posiciones de descenso tras un complicado inicio de Liga.