"Las nuevas normas traerán más inversiones"
Los grupos cotizados europeos harán sus cuentas con estas reglas a partir de 2005
Todos los grupos cotizados europeos deberán elaborar sus cuentas de 2005 de acuerdo a las Normas Internacionales de Contabilidad (NIC). Al frente del IASB, siglas en inglés del organismo que elabora estas reglas, está el escocés sir David Tweedie. El antiguo presidente del organismo contable británico reconoce que cuando asumió el cargo, hará tres años en enero, no podía ni siquiera imaginar la velocidad que tomaría el proceso de convergencia internacional. Eso le ha obligado a trabajar más deprisa y bajo mayor presión.
Pregunta. ¿Están preparados los grupos europeos para las NIC?
Respuesta. Sí. A finales de este mes habremos completado 34 normas que estarán listas para 2005. Hay sólo otras 4 que vendrán más tarde, calculo que en marzo. Son muy restringidas, así que la mayoría estará en pocas semanas y las empresas tendrán un año para prepararse.
"Estamos acercándonos a EE UU. Esperamos unir ambos sistemas en tres años. Es nuestro objetivo más importante después de 2005"
"Los resultados tienden a reducirse. Es uno de los problemas. Probablemente los beneficios en Europa y EE UU están exagerados"
"La mayoría de las normas estarán listas en pocas semanas, así que las compañías tendrán un año para prepararse"
P. ¿Hay muchas diferencias entre países?
R. Sí. En el Reino Unido, las normas son muy parecidas a las NIC, al igual que algunas escandinavas. Muchas compañías alemanas las usan ya. Otros países están más lejos y tendrán que trabajar más duro.
P. ¿Y España?
R. Probablemente no está como el Reino Unido, pero no muy alejada. Es un cambio anunciado y España es uno de los países que se está moviendo bastante rápido.
P. A principios de año una encuesta decía que el 16% de las compañías españolas no había empezado a trabajar, ¿están a tiempo?
R. Creo que sí. La contabilidad es en gran parte sentido común, muchas de las normas ya existen y algunas de las nuevas, como las de instrumentos financieros, son un problema para toda Europa y por eso no las vamos a pedir para las cuentas de 2004. Las que están listas no cambian mucho. Es típico que, hasta que llegue el momento, se tenga una actitud de espera.
P. ¿Cómo le explicaría a un directivo español la importancia del cambio?
R. Si tiene una compañía que busca inversores, será bastante más fácil conseguirlo. Ahora, si una firma de Wall Street quiere invertir en una empresa española se tiene que preguntar: "¿cuál es la diferencia entre la contabilidad española y la americana? No lo entendemos". Esto les puede llevar a la decisión de no arriesgar e invertir en otro sitio. Incluso, si decide invertir, dirá: "Existe un riesgo, así que le voy a cargar un 1% extra". Es lo que se intenta evitar. Vendrá más dinero a España y a un coste menor. Es de lo que trata el cambio; el verdadero incentivo; la razón por la cual Europa va a por ello. Se podrá invertir en toda Europa conociendo la contabilidad.
P. ¿Cómo mejoran las NIC la transparencia de los mercados?
R. Los inversores conocen lo que hay. Saben que si miran las cuentas de una empresa bien auditada pueden confiar en ellas. Así se incrementa la transparencia. Ésta es la razón por la cual en Asia varios países han elegido las NIC porque nadie entendía la contabilidad coreana, por ejemplo, pero sí las NIC, porque son muy similares a las estadounidenses. En el momento en que ambas se unan tendrá carácter mundial.
P. Aún hay diferencias entre las estadounidenses y las NIC.
R. Estamos intentando acercarnos. Esperamos unirlas en tres años. Es nuestro objetivo más importante después de 2005.
P. ¿Cuál es la agenda exacta?
R. Ahora en Europa las empresas pueden usar las NIC o las normas estadounidenses. La Comisión Europea dio la posibilidad para las que usan las estadounidenses de hacerlo hasta 2007. Entonces deben cambiar a normas internacionales. Si las unimos, no será un gran cambio para ellas. Además, ¿por qué dos métodos? ¿Es uno mejor? Si son lo mismo, elijamos uno. Estamos de acuerdo en que podemos utilizar distintas palabras, pero el fondo es el mismo. Cambiaremos juntos.
P. ¿Cree que ese acercamiento hubiera sido posible sin el escándalo Enron y otros?
R. No hay duda de que lo ha hecho más fácil. En EE UU se dieron cuenta de que las cosas no eran perfectas. La contabilidad fue sólo parte del problema, aunque no el fundamental, que era el fraude. Sin embargo, esto les ha hecho pensar más, fijarse en lo que había fuera. Están convencidos de que no es sólo unir las normas estadounidenses y las internacionales, sino de mejorar ambas.
P. ¿Las NIC van a hacer más difíciles los escándalos?
R. No si fallan las auditorías o el gobierno corporativo. Podemos escribir reglas, pero si no se cumplen no hay nada que hacer.
P. Dicen que las NIC dan una imagen más real de las compañías, ¿significa que las que se están utilizando no lo hacen?
R. No. Todos los sistemas contables tienen problemas. Lo que queremos es reflejar lo que ocurre en una empresa y ése es uno de los grandes cambios. Por ejemplo, si en los años buenos no contabilizas algo y en los malos lo sumas, los inversores no saben lo que está pasando. Tenemos ejemplos de empresas británicas donde los beneficios crecen continuamente y cuando cambian las reglas contables fluctúan. Pueden manipular las cuentas. Lo que intentamos es evitar este tipo de control. Ok, es un mal año, la economía va mal, vamos a explicarlo. A los inversores no les gustan las sorpresas, que es lo que fueron Enron o WorldCom.
P. ¿Han calculado el impacto de las NIC en las empresas? ¿Descenderán los resultados?
R. Tienden a reducirse. Es uno de los problemas. Probablemente en Europa los beneficios están exagerados, igual que en EE UU.
P. Las críticas han venido sobre todo de la banca, ¿por qué?
R. Tienen muchos instrumentos financieros. La gran pregunta para el sector es: ¿Qué tiene de especial Europa que no les gusta [las NIC sobre instrumentos financieros]? EE UU y Japón utilizan una norma similar. Es lo mejor que hemos podido hacer. Podríamos hacer más, pero tampoco les gustaría. Lo discutiremos después de 2005. No tenemos nada que ganar peleándonos con los bancos, y si nos convencen de que estamos equivocados, cambiaremos.
P. ¿Qué mecanismos tienen para aguantar las presiones?
R. Tenemos directores independientes que no están controlados por políticos. Intentamos que las normas sean lo más transparentes posible, proteger a los inversores.
P. ¿Cuando llegó al cargo pensaba que todo iría tan rápido?
R. Nos sorprendieron mucho las decisiones europea y australiana y las que vinieron después. Eso nos ha puesto más presión para llegar a a 2005, debemos actuar rápidamente.
El proceso de concienciación avanza en España, según KPMG
Los empresarios españoles pudieron escuchar al presidente del organismo que emite las normas internacionales de contabilidad, sir David Tweedie, hace 10 días en Madrid en unas jornadas organizadas por KPMG. Para el socio responsable de conversión a Normas Internacionales de Contabilidad de esta firma, Enrique Asla, la concienciación de las compañías españolas sobre la importancia de este cambio ha aumentado "notablemente" desde el verano, por lo que muchas han incluido una partida en el presupuesto de 2004: "Los principales grupos consideran la conversión un asunto estratégico y ya han creado grupos de trabajo para tratar de identificar las diferencias principales", asegura este auditor.
Están en una primera etapa del proceso. "En estos momentos no estamos hablando de un problema de auditoría, sino de gestión de un proyecto que desembocará en la creación de unos estados financieros consolidados que habrá que someter a auditoría". El proceso de conversión afectará "a procesos, sistemas y negocios, constituyéndose por lo tanto en un proyecto de gestión del cambio que requerirá la involucración de profesionales de nuestros grupos cotizados y la colaboración de asesores externos", resume.
A pesar de ello, son los auditores los que están liderando el proceso. ¿No crea esto un conflicto de interés? "Ése es el problema fundamental que habrá que abordar", reconoce Asla. "Las empresas cotizadas españolas deben saber que hay partes del proceso de conversión que no pueden ser realizadas por sus auditores". Y enumera "todas aquellas áreas que estén relacionadas con el proceso de toma de decisiones, la gestión del proyecto, la elaboración de manuales de poíticas financieras y otas tareas relacionadas con el proyecto de conversión cuya ejecución suponga una merma de los requisitos de independencia no podrán ser desarrolladas por los auditores de sus cuentas anuales.
Para Enrique Asla, es importante que que "los órganos directivos de las empresas cotizadas entiendan la verdadera dimensión del proyecto, que no es exclusivamente financiero, sino que sus efectos tienen una trascendencia mucho más amplia". En este sentido, "se van a ver afectados los indicadores de rentabilidad y la forma en que se están estructurando en la actualidad determinadas transacciones. Por lo tanto habrá que repasar, entre otros aspectos, el inventario de contratos financieros y no financieros y la redacción de distintas cláusulas".
El consejo es sencillo: "Si queremos estar en condiciones de que las cuentas anuales consolidadas del ejercicio 2005 presentar a los mercados de capitales una situación del negocio suficientemente atractiva hay que empezar a trabajar ya en presupuestación y en el redireccionamiento de la organización".
Las firmas de auditoría han visto una orportunidad de negocio en este cambio obligado. KPMG ha cerrado cuatro contratos con empresas del Ibexy otros dos de otras compañías cotizadas y tiene otros en proceso de confirmación.
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