Aguirre rebajará un promedio de 160 euros a cada familia en el IRPF

La candidata a convertirse en presidenta de la Comunidad de Madrid bajará el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF). En concreto, un punto en el tramo autonómico, lo que significará que los madrileños dejarán de pagar por términos medio unos 160 euros (163 euros para una renta bruta de 23.400 euros). Una propuesta pionera en las haciendas autonómicas, ya que hasta ahora nunca antes lo había hecho ningún otro Gobierno regional. También se comprometió a construir siete hospitales y 79.000 viviendas en régimen de alquiler con opción a compra.

Ejemplo práctico de la propuesta anunciada ayer por Aguirre: una familia que tributara en la declaración de la renta por unos ingresos brutos anuales de 23.400 euros habría pagado este año 1.269,44 euros en el tramo autonómico, lo que supone un 7,77% del impuesto. Pero, con la rebaja anunciada por Aguirre, esta familia madrileña tipo tributará en la declaración del año próximo (cuando ya se aplique el descuento) un 6,77%, lo que supondrá que tendrá que pagar a las arcas regionales unos 163 euros menos, según fuentes consultadas por EL PAÍS.

En 2000 se presentaron en la Comunidad de Madrid unos 2 millones de declaraciones del IRPF. Dado que fuentes del equipo de Aguirre estiman que las arcas regionales dejarán de ingresar 150 millones de euros, un cálculo lineal daría una media de ahorro por contribuyente de 75 euros.

Pasados cuatro minutos del mediodía de ayer, la candidata a convertirse en la primera mujer presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre (PP), comenzó la lectura de los 49 folios de su discurso de investidura. Un discurso en el que había una sorpresa respecto a lo ya prometido durante la larguísima campaña electoral: una rebaja de un punto en el tramo autonómico del IRPF.

Los contribuyentes del IRPF pagan una parte a la Administración central y otra a la comunidad autónoma, en una relación de 70%-30%, mediante una tarifa dividida en cinco tramos con tipos impositivos distintos en una escala de entre el 15% y el 45%.

A su vez, cada tramo se divide en dos, con dos tipos distintos: uno es el que se paga a la Administración central y el otro, a la comunidad autónoma. La tarifa arranca con un tipo mínimo del 9,06% para la Administración central y un 5,94% para la autonómica (en total 15%), para ingresos (base liquidable) de hasta 4.000 euros anuales. La iniciativa de Aguirre consiste en que ese 5,94% de la Comunidad se va a reducir a un 4,94%. A partir de ahí, se reconstruirá toda la tarifa, de forma que la rebaja en cada tramo posterior sea también de aproximadamente un punto. La razón por la cual la rebaja no es automáticamente la misma en los siguientes tramos es que la tarifa del IRPF es progresiva, es decir, se paga una cantidad fija por cada tramo de renta y un porcentaje (tipo marginal) sobre el resto hasta el siguiente tramo. De ahí resulta un tipo medio para cada tramo, que es el que se calculará para que el descuento resulte de un punto.

Aguirre manifestó que esta rebaja en los impuestos, unida a una política de "austeridad fiscal", significará una mayor creación de empleo y un estímulo para la actividad económica. La candidata lanzó el reto, pero no lo cuantificó en su discurso."La mejor manera de incentivar la creación de empleo" pasa por "bajar los impuestos", según Aguirre. Una política radicalmente opuesta a la de su compañero de partido el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón que recaudará un 26% más en impuestos que su antecesor. Esta nueva propuesta de bajada de impuestos supone un plus sobre lo ya prometido en la campaña electoral. Un plus que supone a las arcas autonómicas dejar de ingresar 150 millones de euros.

Aguirre criticó con dureza, durante la campaña electoral, la propuesta de su oponente, Rafael Simancas, de ofrecer transporte gratis para los mayores de 65 y menores de 21 años, cuyo coste cifraba el candidato socialista en 190 millones de euros. Casi los mismos que Aguirre también dejará de ingresar en concepto de impuesto de sucesiones que piensa eliminar entre padres e hijos y cónyuges.

La candidata quiere, además, "revisar el papel de determinadas empresas públicas y privatizar todas aquellas cuya pertenencia al sector público no se considere justificada", aunque tampoco dio una sola pista de cuáles serían estas corporaciones que estarían en el punto de mira de la privatización. Las empresas que podría privatizar la candidata son el Canal de Isabel II que ingresa más de 6 millones de euros al año; la Inspección Técnica de Vehículos de la Comunidad de Madrid y Telemadrid. La televisión autonómica tenía una deuda al cierre de 2002 de 135,8 millones de euros y un déficit anual de cerca de 70 millones de euros. Alberto Ruiz-Gallardón ya trató de privatizarla, pero su intento fue parado por el Congreso de los Diputados, que no autorizó la reforma de la Ley Estatal de Terceros Canales.

Asímismo, Aguirre afirmó que creará un tribunal de defensa de la competencia como nuevo órgano autonómico que persiga las prácticas empresariales que vayan en contra de la competencia y defienda al consumidor.

Cuidado del ciudadano 5.500 nuevos policías

Dentro de este apartado, Aguirre hizo hincapié en la seguridad ciudadana como "garantía de libertad" para todos los habitantes de Madrid. Aguirre manifestó que creará una Consejería de Justicia e Interior con rango de vicepresidencia. Esta nueva consejería estará encargada, entre otras cosas, de crear unas Brigadas Especiales de Seguridad Ciudadana de la Comunidad de Madrid (Bescam). Brigadas que se formarán con 5.500 nuevos policías, de los que 3.000 serán miembros del Cuerpo Nacional de Policía y los 2.500 restantes policías municipales. Aguirre manifestó que estos "dependerán de sus mandos naturales, alcaldes y el Ministerio del Interior", pero "serán financiados, en parte por la Comunidad". Además, aseguró que estas brigadas actuarán desde 30 bases operativas situadas en los municipios de más de 25.000 habitantes. En el apartado de justicia, la candidata aseguró que "rapidez" y "eficacia" serán sus principales objetivos.

La voluntad de la aspirante es "concentrar las sedes judiciales en un único espacio", así como modernizarlas y adaptarlas a las nuevas tecnologías. Tanto las sedes ya existentes como las que la futura consejería considere oportuno crear después de elaborar un mapa judicial de Madrid.

Aguirre también pretende crear una red regional de oficinas judiciales en municipios y en distritos. Estas oficinas, según el plan de la candidata, permitirán a los ciudadanos realizar gestiones judiciales cerca de sus domicilios y "permitirán un mejor conocimiento por parte del personal de la Administración de Justicia de las circunstancias concretas de cada municipio o distrito".

En la sanidad, se centró en su compromiso de hacer "siete nuevos hospitales: Puerta de Hierro, del Henares, del Norte, de Vallecas, del Tajo, del Sur, del Sureste", así como la construcción de "50 nuevos centros de salud, que aumentarán considerablemente los recursos de la atención primaria".

En su discurso la candidata recordó su promesa electoral de reducir a menos de un mes, antes de noviembre de 2005, las listas de espera quirúrgicas. Lo que no dijo en su discurso fue lo mismo que ya había reiterado durante la campaña electoral: que dimitiría si no lograba alcanzar este reto.

A continuación se comprometió a realizar políticas encaminadas a favorecer la igualdad entre hombres y mujeres en todos los campos, pero hizo especial hincapié en la igualdad de oportunidades en el empleo "no sólo de las madrileñas, sino también de las mujeres inmigrantes" que llegan a la región.

En familia, aseguró que creará una nueva Consejería de Familia y Asuntos Sociales, que impulsará las iniciativas como una batería de deducciones en el IRPF tales como "un incremento de hasta 900 euros de la deducción por acogimiento familiar no remunerado de cada persona mayor de 65 años o con discapacidad; la deducción de 600 euros en caso de parto múltiple; la reducción del tipo de gravamen del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales para las familias numerosas en la adquisición de su vivienda habitual; y la bonificación de un 85% en la cuota a pagar por las cantidades que los padres donen a sus hijos para ayudarles a comprar su primera vivienda".

Modernización de Madrid Liberalización del suelo

Aguirre recordó que "la ley estatal de 1998 sienta el principio de que todo aquello que no está protegido por sus valores medioambientales, arqueológicos o de otro tipo puede ser transformado en suelo urbanizable". Para Aguirre, "la Comunidad de Madrid tiene que avanzar en el proceso de liberalización y trasladar a los Ayuntamientos la necesidad de revisar sus planteamientos en este sentido". La candidata manifestó que su intención es lograr el mayor consenso posible para modificar la Ley del Suelo, pero no concretó en qué sentido.

Para llevar a cabo sus propuestas en vivienda, creará la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. La competencia para calificar el suelo como urbanizable recae en los Ayuntamientos, por lo que a la candidata puede resultarle complicado disponer de todo el suelo no protegido para llevar a cabo sus promesas en aquellos municipios gobernados por la izquierda.

Además quiso realizar una reformulación del concepto de vivienda protegida: "soy partidaria de que las ayudas a la vivienda se centren en las personas y no en el inmueble, puesto que se trata de facilitar el acceso de los ciudadanos a una vivienda, y no de subsidiar una inversión inmobiliaria". Manifestó su intención de favorecer la construcción de 79.000 viviendas de alquiler con opción a compra.

En cuestiones medioambientales, afirmó que creará el parque forestal del sur, con una superficie de 3.000 hectáreas, y que plantará 14 millones de árboles con el objetivo de reforestar 9.000 hectáreas. En el capítulo de infraestructuras afirmó que construirá 60,2 kilómetros nuevos de metro y un tren ligero que unirá Móstoles y Navalcarnero, a completar una red de carreteras que facilite el acceso de los municipios del sur a Madrid.

En educación afirmó que toca el turno de la gratuidad para la enseñanza de los niños de 0 a 3 años y se comprometió a " llegar a las 50.000 plazas" para este tramo de edad. También manifestó su intención de ayudar a las familias a la adquisición de los libros de texto, con una desgravación de 100 euros en el IRPF por cada hijo en el tramo de enseñanza obligatoria y una beca de la misma cuantía para todos aquellos que no tengan que declarar en el Impuesto sobre la Renta.

En cultura y deportes, impulsará las vanguardias creativas y el intercambio cultural con Latinoamérica, así como fomentar la plena capacidad de Madrid ante el reto de las Olimpiadas de 2012. Así como hacer de Telemadrid una televisión de calidad en la que no quepa la "telebasura".

Regeneración democrática Fin del grupo mixto

Una de las medidas más sorprendentes que expuso la candidata del PP en esta materia consiste en eliminar la figura del grupo mixto dentro de la Cámara autonómica. Según Aguirre, este grupo sólo puede estar constituido en la Cámara madrileña "por tránsfugas o escisiones de los partidos que alcanzan representación parlamentaria".

También anunció que se creará la categoría del diputado no adscrito, algo que ya propuso el PSOE que se realizase durante la pasada legislatura. Pero Aguirre quiere realizar esta reforma reglamentaria con "serenidad". Manifestó su intención de desbloquear las listas electorales así como la división de Madrid en "10 o 12 circunscripciones de 500.000 habitantes cada una y en las que el ciudadano pueda elegir a 9 o 10 candidatos".

Esperanza Aguirre también aseguró que mejorará el sistema actual de escrutinio electoral para que el Gobierno regional informe de "manera homogénea" de los resultados, y no proporcione los datos "de forma aleatoria".