El partido mestizo por excelencia

John Lennon y su Imagine, Serrat, Comediants y ritmos aflamencados. Todos los espectáculos y músicas que animaron ayer al público en el mitin central del PSC, además de los discursos de los teloneros, tenían un claro objetivo: demostrar que este partido es el partido mestizo por excelencia, que defiende más autogobierno pero también apoya a los "otros catalanes", los hijos de inmigrantes. Manuela de Madre, ex alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, reivindicó la inmigración que ha hecho "crecer a Cataluña con sangre y trabajo" mientras "otros", en referencia a los nacionalistas, les miraban "por encima del hombro".

El público vibraba con cada reivindicación de esos "otros catalanes". También cuando otro hombre proveniente de la inmigración, el primer secretario del PSC, José Montilla, aseguró: "Nadie puede decirnos quién es buen o mal catalán". Las casi 20.000 personas que fueron llenando poco a poco el Sant Jordi se dedicaron a abuchear cada vez que un orador hablaba de CiU. Montilla llegó a decir que Artur Mas es el verdadero candidato del PP, que CiU "vendió el Ebro por un puñado de votos" y sostuvo que los nacionalistas siguen en esa línea incluso en plena campaña, ya que están negociando para dar el apoyo al PP en la federación de municipios. Era un mitin, pero también una fiesta. Tuvo mucho éxito el humorista Carles Flavià, que dijo lo mismo que los políticos, esto es, que hay que votar a Maragall, pero con una desternillante visión del mundo nacionalista. La escritora Rosa Regás recordó que ella lleva "media vida con Franco y la otra media con CiU". El público se rió e interrumpió a todos con gritos de "Maragall, presidente", "Visca, visca, visca, Cataluña socialista". Hasta a Zapatero le gritaron, "presidente, presidente". Pero sobre todo abuchearon todo el tiempo a los rivales. José María Aznar se llevó la palma al grito de "se va acabar el Gobierno de Aznar". No faltó un "No a la Guerra" multitudinario.