El Gobierno cree que el PHN respeta la directiva del agua contra la opinión de los anti-trasvase

El Ministerio de Medio Ambiente subrayó ayer en Valencia que el Plan Hidrológico Nacional (PHN) es compatible con la directiva europea del agua, que busca que el estado de las aguas de la UE en 2015 sea "ecológicamente satisfactorio". El director general de Obras Hidráulicas, Juan Manuel Aragonés, agregó que el trasvase del Ebro no causará ningún perjuicio a la cuenca cedente. El portavoz de la Fundación Nueva Cultura del Agua, Antonio Estevan, argumentó que el trasvase, en contra de la directiva, no soporta un análisis de costes y deteriora las cuencas.

La directiva europea del agua, que el Gobierno español adaptará antes de que concluya el año, pretende que el estado de las aguas sea en 2015 ecológicamente "satisfactorio", explicó ayer el director general de Obras Hidráulicas del Ministerio de Medio Ambiente, Juan Manuel Aragonés. Desde ayer un centenar de expertos debaten en Valencia la aplicación de esta directiva marco en el Júcar, una de las nueve cuencas piloto de la UE.

En pleno debate sobre la declaración de impacto medioambiental del PHN y más concretamente del trasvase del Ebro, la obra más emblemática, Aragonés aseguró que el PHN proporcionará a las cuencas deficitarias el agua que necesitan "sin dañar las cuencas emisoras y respetando todas las medidas ambientales". "El PHN no es incompatible con la directiva", subrayó Aragonés, para quien el estado actual de las aguas en España "es bueno, pero mejorable". El director general anticipó que la adaptación a la normativa comunitaria, en vigor desde el año 2000, obligará a revisar los planes de cuenca en los próximos ocho años. "El PHN no está afectado por esta directiva. Lo único que exige y establece son unas garantías de cesión de agua de una cuenca a otra y de impacto medioambiental", agregó Aragonés, para quien la desalación es tan sólo una medida complementaria y el trasvase un proyecto necesario. "Se trata de conseguir, al menos, que esa calidad no empeore sino incluso que mejore", apostilló el alto cargo ministerial.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, José Manuel González Ortea, subrayó que este organismo es en estos momentos "centro de la atención de toda Europa", sobre todo porque esta experiencia piloto en el Júcar ofrecerá información acerca de "cómo se puede mejorar la gestión de las cuencas mediterráneas". Según González Ortea, el plan de cuenca del Júcar deberá adaptarse a lo que se conoce como demarcación hidrográfica, donde se conjugarán los planes de costa, las medidas de saneamiento y depuración de aguas, así como las competencias de las comunidades autónomas y entes locales.

De la cuenca del Segura habló el presidente de la Confederación Hidrográfica que gestiona este río, Juan Cánovas. "En 30 años no ha habido un crecimiento desmesurado de la demanda ni una mala gestión de los recursos hídricos", defendió Cánovas, que subrayó que el trasvase del Tajo-Segura "es uno de los mejor gestionados del mundo". "Otra cosa", añadió Cánovas, "es que haya una dialéctica de oposición que yo puedo comprender, pero la gestión que dirijo se puede defender en todo momento como ajustada a la ley y a unos principios de sostenibilidad".

A poco metros del hotel donde tenía lugar el seminario internacional organizado por el Ministerio de Medio Ambiente, la Fundación Nueva Cultura del Agua, contraria al trasvase del Ebro, debatía sobre las repercusiones que tendrá el PHN sobre la cuenca del Júcar. Antonio Estevan, portavoz de la fundación en la Comunidad, apuntó que el trasvase del Ebro, a diferencia de lo que establece la directiva de aguas, "sí deteriora, no sólo la cuenca cedente [del Ebro] sino también la receptora, sobre todo en los años de más bajo caudal". La directiva exige además transparencia en la política de precios y, a juicio de Estevan, el Plan Hidrológico "no soporta un análisis de costes".

Caudal ecológico del Júcar

El portavoz del Foro Nueva Cultura del Agua criticó además la trasposición por parte del Ministerio de Medio Ambiente de la directiva europea a la legislación española -se aprobará dentro de la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos-. "Es una chapuza jurídica", añadió.

Estevan apuntó que el Plan del Júcar, pactado por el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista José Bono, y el Gobierno central, "es un problema cerrado en falso". "La Comunidad Valenciana le vendió a Bono, a cambio de su apoyo al PHN, gran parte del agua del Júcar y esto, como ya pasó en el Segura, significa que el río se irá pudriendo y muriendo poco a poco". Los asistentes a la jornada Per un Xúquer viu pedirán a la CHJ la revisión del plan de cuenca para dotar al río de un caudal mínimo ecológico entre el embalse de Tous y la desembocadura del río.