Moda a golpe de tambor y violín
La noche del lunes, el Museo Guggenheim de Bilbao volvió a convertirse en una lujosa pasarela, siendo la segunda vez tras la exposición de Giorgio Armani que alberga un acontecimiento del vestir. La más internacional de las firmas españolas, Loewe, presentó por primera vez en solitario su colección masculina, ideada por el diseñador canario José Luis Toribio, poco conocido para la mayoría pero muy respetado dentro del sector. La colección de verano fue vista a golpe de tambores cubanos y violín, con la asociación del blanco y el azul oscuro junto a los colores de la tierra. Sobre la pasarela destacaron los españoles Andrés Velencoso y David Guillo, el italo-argentino Julián Méndola y el holandés Marten Cuiper. Con este desfile, Loewe se lanza definitivamente a la implantación en el mercado internacional de sus creaciones para hombre, apostando por el refinado tratamiento estival de las pieles y el cuadro clásico subvertido, lo que puede llamarse neoformal-chic.
