La Conferencia de Donantes busca en Madrid 36.000 millones para Irak

Primero hubo que pagar la guerra; ahora hay que pagar la Paz. La Conferencia de Donantes que se celebra en Madrid hoy y mañana pasa la bandeja para recoger 36.000 millones de euros que, según la ONU y el Banco Mundial, son los que se necesitan para la reconstrucción de Irak. Para el Fondo Monetario Internacional (FMI), Irak necesita 70.000 millones.

Ana Palacio, ministra de Asuntos Exteriores española, confía en que "refleje el compromiso de la comunidad internacional con la reconstrucción iraquí", según declaraciones a la cadena CNN+.

Al cierre de esta edición Kofi Annan, secretario general de Naciones Unidas, no había confirmado su asistencia a la reunión.

España, sede de la conferencia, calificará la reunión de éxito si el cesto se llena con 5.000 millones. España aportará 300; toda la Unión Europea es probable que no pase de los 200 millones, aparte de los 375 que dona el Reino Unido; Francia y Alemania no han dado cifras y Japón donará 5.000 millones en cuatro años.

El Banco Mundial cifra la reconstrucción de Irak en 9.000 millones para 2004 más otros 27.000 para llegar al año 2007, destinados a poner en pie, tras más de 20 años de guerra y 12 de embargo internacional, los 14 sectores económicos básicos como la sanidad, la educación, el agua o la electricidad. Y sin contar con los 20.000 millones que la Autoridad Provisional de la Coalición (Estados Unidos) destinará a seguridad y petróleo.

Un informe de Globalsecurity.org dice que puede oscilar entre 100.000 y 500.000 millones de dólares "dependiendo del tiempo y del personal estacionado en Irak".

En la página oficial de la conferencia. comisionadoiraq.org, se encuentra los informes de situación así como los planes para la reconstrucción.

"¿Por qué pagar para destruir y luego para construir?", se preguntan algunos, por ejemplo, Nodo50. Para esta organización la reunión de Madrid es "la escenificación más cínica e inmoral de la pretensión de la Administración Bush y del gobierno de Blair de pasarle a la denominada comunidad internacional sus responsabilidades por la crisis social y humanitaria que vive la población iraquí tras una década de sanciones y guerras, mientras procura -no sin dificultades- afianzar su control estratégico sobre el país adueñándose de sus riquezas".

La organización ATTAC se ha movilizado también contra la reunión y en su página dan respuesta a siete preguntas sobre porqué hay que oponerse a la conferencia de donantes. "La responsabilidad por la destrucción de Iraq corresponde a EE UU y el Reino Unido, cuyos sucesivos gobiernos han mantenido desde 1990 una estrategia de destrucción de Irak".

ATTAC critica que se cree este fondo si ya existe el Fondo de desarrollo de Irak de la ONU: "Los ocupantes no están destinando el dinero a mejorar la situación de la población iraquí sino a cubrir los créditos bancarios otorgados a las multinacionales estadounidenses que, como Halliburton y Bechtel, han sido seleccionadas por las fuerzas de ocupación para participar en la explotación de Iraq, particularmente en su sector energético".

Un decreto del 20 de julio de Bremer determinaba que el recién creado Banco de Comercio de Iraq (controlado por los ocupantes) utilice los fondos del FDI "para garantizar estos créditos hasta que se pueda recuperar la producción y exportación petrolíferas, al menos a los niveles previos a la invasión: las reservas petrolíferas de Iraq (las segundas del planeta) están ya de facto hipotecadas en el proceso de reconversión del país a una economía capitalista", explican.