Miles de ciudadanos piden en Alicante un impulso al uso social del valenciano

Decenas de miles de personas se sumaron ayer a la manifestación que recorrió Alicante bajo el lema Compromís pel valencià. Con motivo del vigésimo aniversario de la aprobación por las Cortes, precisamente en Alicante, de la Llei d'Ús i Ensenyament del Valencià, los organizadores de este acto lúdico y reivindicativo aprovecharon la ocasión para exigir un impulso institucional al "uso social" del valenciano. Según cifras de los organizadores, a la marcha se sumaron más de 4.000 personas, aunque la Policía Local redujo la cifra a unos 3.000.

Unos Nanos i Gegants, un Drac y varias colles de castellers abrían esta manifestación encabezada por una pancarta portada por niños que simbolizaba el futuro del valenciano. Acompañados del sonido de la dolçaina y el tabalet los manifestantes llegaron, pasadas las ocho de la tarde, a la plaza del puerto. La lluvia aceleró la lectura del manifesto por parte del rector de la Universidad de Alicante, Salvador Ordóñez. En el comunicado los organizadores del acto denuncian una "falta de voluntad política para desarrollar y aplicar" la Llei d'Ús, que aunque ha permitido aumentar el conocimiento de la lengua, "en el uso público del valenciano todavía no ha dado sus frutos". En el discurso también criticaron que en el ámbito político "haya habido desinterés" en el uso de la lengua y un intento de "reducir nuestra identidad como valencianos a la acepción más folclórica".

En el parlamento lamentaron que "desgraciadamente" todavía se asocie el valenciano al "conflicto", y recordaron el último incidente con motivo de la exclusión de los licenciados en Filologia Catalana para acreditar conocimientos de valenciano. "Con intenciones perversas se ha buscado el enfrentamiento y la conflictividad para paralizar el uso del valenciano", dijo Ordóñez. Hace justo un año que varios colectivos, como Escola Valenciana, asociaciones de padres, los sindicatos STEPV, CCOO, UGT, la entidad Acció Cultural, los partidos PSPV, EU, Bloc Nacionalista Valencià y Esquerra Republicana, así como decenas de ayuntamientos, entre otros, firmaron el Compromís pel valencià, un documento que recoge 50 medidas para avanzar en el uso social de la lengua. "Un movimiento que no va contra nadie, sino que es una propuesta de actuación civil útil, para superar problemas y barreras creadas en torno a nuestra lengua y cultura", agregó Ordóñez, que exigió el compromiso de la Generalitat. Ayer a esta manifestación se sumaron los principales líderes sindicales, el recién elegido secretario del Bloc, Enric Morera, y representantes del PSPV como el alcalde de Elche, Diego Macià.