Un juez encarcela a un dirigente de CGT denunciado por una pintada

El secretario provincial de la Confederación General del Trabajo (CGT) en Sevilla, Francisco Javier Fernández Solís, ingresó en la tarde de ayer en el centro penitenciario de Sevilla por orden del Juzgado de Instrucción número 6, que tramita las diligencias abiertas por unas pintadas realizadas contra la empresa Iberphon durante un conflicto laboral en enero pasado, según informó ayer la organización sindical.

Francisco Cárdenas, secretario de finanzas de CGT en Sevilla, aseguró que la detención de su compañero ocurrió alrededor de las 14.30, cuando participaba en una concentración de protesta a las puertas del tanatorio que gestiona la empresa SCI Spain en la capital andaluza. "Llegaron policías de la brigada de información a identificar a algunos y se lo llevaron sólo a él", señaló. El abogado de la organización, Miguel Ángel García Mariscal, averiguó posteriormente que la actuación policial obedecía a una orden dictada por el juzgado de instrucción número 6 el pasado 30 de junio mediante la que decretaba el ingreso en prisión del secretario provincial de CGT. "Supongo, por buscarle alguna lógica jurídica, que primero lo declaró en paradero desconocido, pero en ningún caso le notificó nada", censuró el letrado.

Medida desmesurada

Francisco Javier Fernández Solís pasó en pocas horas a disposición judicial y, alrededor de las 19.00, fue conducido a prisión, si bien el juzgado de guardia ha ordenado su excarcelación para hoy para que comparezca de nuevo ante el juez con el fin de que pueda decretar una medida a la vista de las diligencias abiertas por las pintadas. El abogado de CGT indicó ayer que todo el proceso judicial se había desarrollado con normalidad hasta el dictado del auto en prisión.

"Aparte de querer su libertad inmediata, nos parece una medida desmesurada contra los movimientos sociales", criticó Cárdenas. El sindicalista señaló que, en su calidad de secretario provincial de CGT, el detenido es "alguien público y conocido" en Sevilla. "No hacía falta detenerle como a un delincuente", censuró.

Los hechos que originaron la denuncia contra el representante de CGT se enmarcan en el conflicto laboral ocurrido en la empresa Iberphone. Durante una huelga convocada el 17 de enero por el despido de 300 trabajadores, según el sindicato, se realizadon pintadas contra los despidos "masivos" y en favor de la huelga. "Alguien, supuestamente, identifica al secretario general de CGT como autor de las pintadas y la empresa presenta la denuncia contra él", señala el asesor jurídico de la organización, que asegura que el juzgado no le notificó ninguna medida.

El sindicato condenó ayer en un comunicado la encarcelación por no encontrarle "justificación de ningún tipo". "Constituyen la criminalización de la actividad sindical por unos hechos tan nimios", agregan.