Los jueces tendrán que evaluarse cada cinco años, según Michavila

El ministro de Justicia, José María Michavila, anunció ayer en el foro Tribuna Barcelona, que la Escuela Judicial, con sede en esta ciudad, se convertirá en un centro de formación permanente de los 4.200 jueces y magistrados que ejercen en España, de manera que todos ellos deberán formarse en esas instalaciones al menos en una ocasión cada cinco años. La formación continuada de los jueces es una competencia del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), por lo que el anuncio sorprendió a varios vocales, que no habían sido informados de la iniciativa.

"Estoy muy sorprendido de que se haga un anuncio así sin consultar al consejo, salvo que se piense que se nos puede dar instrucciones", aseguró a EL PAÍS el vocal Luis Aguiar, de la minoría progresista e integrante de la comisión de Escuela Judicial del Consejo. Aguiar recordó que el anuncio de Michavila requiere de una reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial y que en la actual legislatura no hay tiempo material para tramitarlo. Alfons López Tena, vocal de la misma comisión, calificó el anuncio de "puro humo". López Tena y Aguiar se mostraron conformes con la iniciativa, pero censuraron la forma cómo se ha planteado. Otro vocal progresista, Javier Martínez Lázaro, señaló que "el Consejo no puede renunciar a esa competencia legal".

La Escuela Judicial ha sufrido una constante reducción de su actividad durante el mandato del actual CGPJ. El pasado mes de julio el número de profesores se redujo de 14 a siete. Hace unas semanas entró la primera promoción de alumnos convocada por este Consejo, de 124 personas, cifra sensiblemente inferior a las promociones anteriores, que siempre oscilaron entre 230 y 300 alumnos. La promoción de 2005 sólo tendrá 54 alumnos, en consonancia con el planteamiento ministerial de que la planta judicial ya está prácticamente cubierta y no hacen falta más jueces en España.