"¿Miedo? Lo tendrá el rival"

El seleccionador español, Iñaki Sáez, de 60 años, dio un puñetazo encima de la mesa nada más terminar la victoria de su equipo en Armenia. Quiso dejar bien claro que España no tiene por qué temer al rival de la repesca de los días 15 y 19 de noviembre, sea cual sea en el sorteo del próximo lunes en Francfort. "Tenemos equipo para afrontar esto con garatías", declaró Sáez, que observó incluso un pesimismo excesivo en las preguntas de los periodistas españoles: "Os veo con pesimismo. Parece que estéis cagaos y creo el que tiene que tener miedo es el rival". A falta de dos nombres, los posibles rivales son Holanda, Noruega, Escocia, Rusia, Turquía, Eslovenia y Letonia. Nada más concluir el encuentro, el vestuario español ya estaba hablando de la repesca. Y en concreto de dónde se disputará el partido en España: "Será en un campo de más de 50.000 espectadores, con una afición que se vuelque y que tenga muchos de sus jugadores en la selección. Ya está todo dicho", declaró Sáez en alusión al estadio de Mestalla, pues el Valencia es actualmente el equipo que más jugadores aporta al combinado español: Baraja, Albelda, Vicente, Marchena y Cañizares.

"Cuando he marcado, me ha dado un subidón", dijo Reyes, el único eufórico en la selección

El entrenador vasco trataba así de combatir el abatimiento que se había apoderado del banquillo español cuando Tsartas marcó de penalti el gol de Grecia ante Irlanda de Norte. El empate a cero había levantado una ilusión entre los españoles que se desinfló con ese penalti.

Pasados por la ducha los futbolistas españoles, llegó el tiempo de la reflexión. La de Michel Salgado, por ejemplo, que comentó: "No hemos hecho una mala fase de clasificación, lo que ocurre es que, en el fútbol, si bajas la cabeza un poquito, lo pagas [en referencia a la derrota ante Grecia y el empate en Irlanda del Norte]". Más que elegir un rival para la repesca, el lateral derecho del Real Madrid expresó su deseo de disputar el primer partido fuera de España. "Ése sí va a ser un factor clave".

Puestos a reflexionar, Albelda fue más lejos. El centrocampista del Valencia hizo un alarde de sinceridad al subrayar los defectos que observa en la selección. "Nos falta trabajar el tema táctico. Yo que vengo de un equipo en el que trabajo muy bien tácticamente, sí noto aquí esa falta. No es culpa de nadie, porque el calendario está muy saturado y aquí tenemos poco tiempo para trabajar". "Con el cero a cero en Grecia en el descanso nos hicimos ilusiones. Los fallos han sido nuestros: con Grecia aquí y con Irlanda allá. Sí somos los más fuertes del grupo, pero el más fuerte no siempre gana", añadió Albelda.

Frente al desánimo general, una excepción: el delantero del Sevillla José Antoni Reyes, de 20 años. Era su tercer partido internacional, entró por Vicente en el minuto 60 y le dio "un subidón" cuando marcó su primer gol con España. "Ha sido la leche. Estaba tan contento que no sabía cómo celebrarlo. Al final, me he santiguado, he mirado al cielo y se lo he dedicado a todo el mundo", dijo Reyes, cuya euforia interior contrastaba con la frialdad con la que sus compañeros le felicitaban por sus dos tantos. O mejor decir que no lo felicitaban pues sus goles valían de poco. Pero ni así se le apagó a Reyes el alegrón que llevaba. "No voy a olvidar nunca esta noche", agregó. El andaluz va poco a poco consolidándose en la selección y ayer entró en el momento clave: "Sabía que el partido estaba bien para mí, porque ellos estaban cansados y su defensa empezaba a abrirse".

Mucho más tranquilo apareció Raúl, que anotó su tanto número 35 en sus 66 partidos con la selección. "Lo de Grecia era un milagro que no ganara. España está capacitada para jugar donde sea. Serán dos partidos de mucho jugo y de mucha tensión", dijo el delantero del Madrid, de 26 años. Sobre sus preferencias en la repesca, Raúl fue claro: "No estamos para elegir".