"El sector audiovisual necesita un pacto de Estado"

El presidente de Tele 5, Alejandro Echevarría (Bilbao, 1942), ha cubierto casi dos años al frente de la Unión de Televisiones Comerciales Asociadas (Uteca), una entidad que agrupa a los operadores privados Antena 3, Tele 5 y Sogecable, sociedad a la que hoy traspasa la presidencia.

Pregunta. ¿Cuál ha sido el papel de Uteca en este tiempo?

Respuesta. Hemos conseguido convencer a la clase política de que el sector audiovisual español necesita una importante reforma. El diálogo ha sido intenso y se han puesto las bases para poder atacar los problemas de forma inmediata en la siguiente legislatura.

R. ¿Qué cuestiones debe afrontar la nueva ley audiovisual?

P. Primero, debe situar a España en el concierto europeo y mundial con un sector audiovisual moderno y competitivo. Para eso se necesita transformar el actual régimen de concesiones en un sistema de libre competencia y definir de manera concreta el estatuto de las televisiones públicas. Queremos saber a qué estamos jugando. Ha habido una serie de actuaciones respecto a las participaciones cruzadas entre empresas de televisión nacionales, regionales y locales que es necesario corregir. El Gobierno debe suavizar estas limitaciones. Todo eso está discutido. Falta el consenso político. El sector necesita un pacto de Estado entre los partidos para poder establecer algo que tenga duración y futuro. Otro punto de reforma es la Ley de Propiedad Intelectual, que estuvo a punto de cerrarse y resolvía los graves problemas derivados de los innumerables pleitos como consecuencia de los derechos de autor.

"La televisión digital terrestre es una entelequia. Sólo la ven tres amigos"

P. ¿Qué opina de la tendencia del Gobierno a legislar mediante la Ley de Acompañamiento?

R. Sólo sirve para poner parches.

P. ¿Cómo ve el estado de la televisión digital terrestre, es una entelequia?

R. Sí; no sirve para nada. Por contrato, TVE, Antena 3, Tele 5 y Canal + estamos emitiendo, pero la programación sólo la ven tres amigos. La televisión digital terrestre tiene que hacerse con sentido común, por fases y con planes concretos que la hagan viable. Piqué quiso ponerlo en marcha pero no le dejaron.

P. ¿Y la obligatoriedad de invertir el 5% de los ingresos de las televisiones en cine?

R. Preconizamos que se contabilicen las series en ese porcentaje. Las televisiones hacen series de ficción de mucha calidad y eso da trabajo a actores y guionistas, y es una forma de difundir la cultura. La ayuda al cine, al final, no da frutos. La inversión del 5% hay que verla reflejada en qué tipo de películas se hacen en España. Creo que el balance es tremendamente negativo. El cine llora mucho, muy bien y ante quien tiene que llorar.

P. ¿Pueden convivir la televisión pública y la privada?

R. En todos los países existe ese problema; pero en España es dramático. La subvención del Estado a la televisión pública no llega al 10%, cuando en otros países es justo al revés: el 90% procede de la subvención. Los presupuestos de RTVE consolidan el grave problema de la disfunción total: una televisión pública convertida en una televisión comercial en condiciones de competencia desleal. Seguirá provocando gravísimas distorsiones en el sector.

P. En 2004 la deuda acumulada de RTVE superará los 6.600 millones de euros. ¿Hay solución?

R. La única solución es que lo asuma el Estado, pero, lógicamente, cuando tenga un plan de viabilidad razonable y lógico y haya conseguido un equilibrio entre ingresos y gastos. Los intereses de la deuda lastran de una forma tremenda la cuenta de explotación. RTVE tiene que capitalizar esa deuda y sacarla de ahí, pero con un modelo de gestión eficaz y no tan costoso.

P. Pese a todo, a Tele 5 no le va mal.

R. Le va bien porque está bien gestionada. Tiene las ideas claras sobre cuál es su papel, un equipo profesional y unos criterios de gestión muy definidos. Por ejemplo, nunca ha comprado fútbol.

P. ¿Podría Vocento ampliar su participación en Tele 5?

R. Vocento tiene una gran química con Mediaset y aprovechará cualquier oportunidad razonable para crecer en el capital de Tele 5. Puede haberla, pero todavía no se ha concretado, aunque siempre Mediaset mantendrá la mayoría. Hay buen intercambio de papeles, entendimiento y compenetración.

P. Planeta fue socio de Tele 5 y ahora pilota Antena 3. ¿Cómo ve este cambio?

R. Planeta ha aprovechado las oportunidades que le brindaban para intentar formar un grupo multimedia porque quería desarrollarse fuera del libro. Pensamos que tiene que haber grupos profesionales potentes que actúen como motores del sector.

P. ¿Por qué nadie respeta la ley de la contraprogramación?

R. Comunicar la programación con once días de antelación va en contra de toda lógica. No hacemos cambios absurdos, sino los que creemos que son imprescindibles, aunque cabe un periodo razonable de preaviso.

P. ¿La solución sería un Consejo Audiovisual?

R. España es, junto a Luxemburgo, el único país de la Unión Europea que carece de Consejo Audiovisual. Nos parece adecuado que exista, siempre y cuando supervisara la evolución del sector y el cumplimiento de las normas. Y que vigile más la televisión pública que la privada. En los contenidos somos partidarios de la autorregulación, en condiciones que preserve por encima de todo la libertad de expresión, no que marque líneas editoriales a las televisiones.