"Prefiero ser Hernán Cortés que Don Juan"
Pregunta. ¿Es usted el príncipe de los hispanistas?
Respuesta. Hay muchos príncipes. Somos un grupo de amigos en general.
P. Publica ahora El imperio español. ¿Por qué le interesamos tanto?
R. Lo que me interesa es la primera generación de españoles que salió de aquí para buscar en el Nuevo Mundo gloria, dinero o almas. Pero en contraste total con la vida de sus padres.
P. Para imperio, ¿el de Carlos V o el de Bush?
R. El de Carlos V. Bush no usa la palabra imperio. Veremos lo que pasa, pero creo que los americanos no aguantarán el desafío de pasar años trabajando con la gente en Irak.
P. A tenor de cómo se cuenta hoy la historia reciente, ¿cuánto debemos fiarnos de la de hace 500 años?
R. Bueno, no hay más posibilidad que estudiar, leer e imaginar.
P. ¿Qué le atrae más de la conquista: la cruz o la espada?
R. Entiendo más la parte de la espada.
P. ¿Cree que la denominada "postura del misionero" es una aportación española de la época?
R. [Ríe] Había muchos soldados que pasaban la noche con las mujeres indígenas. Misioneros, muy pocos. Más que de México, quizás la expresión venga del Perú.
P. ¿Qué cree que cundía más: el maravedí o el euro?
R. [Ríe] Con los maravedís las cosas funcionaron bastante bien; con el euro, está por ver.
P. ¿Por qué hay tan pocas mujeres conquistadoras?
R. Yo cito en mi libro a Beatriz Montejo, que dijo: "Nosotras, las conquistadoras, hemos combatido tan bien como los hombres". En las batallas de Cortés, y en América, había más mujeres batallando que en Europa.
P. Usted ha sido laborista y conservador. ¿Tanto monta, o le dio un ataque de arrepentimiento?
R. Ahora soy independiente, mucho mejor. Siempre he estado a favor de Europa. Por eso salí del partido laborista en los años setenta y del conservador en los noventa, porque cambiaron totalmente su postura frente a Europa. Yo no me he movido: han sido ellos.
P. Fue asesor para asuntos exteriores de Margaret Thatcher. ¿La encontraba sexy?
R. Atractiva, sí. Sexy ha sido una palabra demasiado utilizada últimamente por el Gobierno Blair, y yo no la empleo.
P. Usted, que es nativo, ¿cree que Albion es tan pérfida como pensamos?
R. No. Somos mucho más naïf. Pérfidos es un piropo que no nos merecemos.
P. En 1981 fue nombrado lord de Inglaterra. ¿Encuentra marchosa la Cámara de los Lores?
R. La Cámara de los Lores es una ilusión, un club muy agradable, cuyos miembros piensan que hacen muchas cosas importantes, aunque no es así.
P. Usted tiene la Gran Cruz de Isabel la Católica. ¿Cree que deben canonizarla?
R. Fue una gran reina, pero santa, pienso que no. Una gran mujer, pero ya digo en mi libro que las grandes personas cometen grandes errores. Su gran apoyo a la Santa Inquisición y la expulsión de los judíos son, en mi opinión, grandes errores.
P. ¿Dónde queda hoy Inquisición?
R. En Cuba, en China... Pienso que en todas nuestras sociedades democráticas tenemos la tiranía del prejucio popular. Ahora, quizá la reintroducción de la Inquisición será una política en el futuro.
P. Usted llegó a prometer copiar a Isabel de Castilla en su gusto por el baile. ¿Cómo lo lleva?
R. Hasta ahora no he cumplido adecuadamente, pero voy a continuar con mis estudios. Los llevo despacio, pero bien.
P. ¿En qué especialidad profundiza?
R. Bolero. Sé que es fácil, pero soy muy torpe.
P. Y ahora resulta que le gustan los toros. ¿Lo cree imprescindible para ser hispanista?
R. No es necesario ni soy experto, pero me gusta el ambiente. Tampoco lo he estudiado adecuadamente, igual que el baile.
P. Si tuviera que reencarnarse en un conquistador, ¿elegiría a Hernán Cortés o a Don Juan?
R. [Ríe] Don Juan sufrió demasiado. Preferiría ser Hernán Cortés.
P. Creo que, además de escribir e investigar, tiene tiempo para romper corazones.
R. Nada. No rompo corazones, desgraciadamente.
P. Le vendrá entonces la fama por su amor por La Celestina.
R. La Celestina fue una profesional muy eficaz. Supongo que ganó mucho dinero protegiendo a sus chicas. Yo no he tenido tiempo de dedicarme a ello. Hasta ahora.
P. Intuyo que lo contempla para el futuro.
R. Es una de las ideas que voy a aprovechar de esta conversación [Risas].
PERFIL
Con casi 72 años y tres hijos, este lord inglés, entre cuyas primeras aficiones está comer y beber bien -"vengo con frecuencia a España porque ¡es tan difícil encontrar merluza adecuada en Inglaterra!"-, se dice, también, amante de charlar y caminar, y asegura, hablando de alcurnias, que "ya no hay aristócratas como los de antes".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.