_
_
_
_
Crítica:MOTOS | PRUEBA
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

La moto multiuso

Sirve para practicar la conducción deportiva o para viajar en pareja y divierte siempre

LA NUEVA DUCATI Multistrada no es una moto barata (cuesta 12.391 euros), pero al menos salta a la vista que es diferente. Los tiempos cambian y los motoristas son cada vez más exigentes y piden modelos que proporcionen grandes satisfacciones y se adapten a cualquier tipo de utilización. Estas exigencias son las que Ducati ha querido interpretar con la Multistrada, una moto polivalente que intenta hacerlo todo bien en cualquier circunstancia.

El nuevo modelo de la marca italiana tiene una línea muy particular que deja ver soluciones propias e innovadoras. La Multistrada (que quiere decir algo así como "muchas carreteras") es alta, bastante grande y tiene un curioso semicarenado articulado por debajo del faro que deja al descubierto el entramado de tubos del chasis. El colín amplio y de formas curvilíneas cubre los dos silenciosos de los escapes, y además está preparado para integrar sin problemas un juego de maletas en los laterales. Podrá gustar mucho o poco, pero tiene unas formas y un estilo inconfundibles que no dejan indiferente.

- CALIDAD BAJO EL CARENADO

El motor de la Multistrada es un bicilíndrico en V longitudinal (en L según los puristas) derivado de la Ducati 1000 DS. Incluye refrigeración por aire y los ingenieros italianos han realizado un trabajo extraordinario para ofrecer un rendimiento superior a lo que cabría esperar de un propulsor con sólo dos válvulas. Así, sorprende tanto su potencia como la rapidez de respuesta al acelerador y rinde 84 CV a 8.000 revoluciones. Entre las mejoras incluye un nuevo escape, un encendido e inyección reprogramados, y cuenta con un cambio de seis relaciones bien escalonadas, que es justo lo que necesita una moto turística con ciertas pretensiones deportivas.

En el bastidor y la parte rodante no se han escatimado medios. El chasis multitubular de acero lleva el sello de la marca y combina una estabilidad y rigidez casi perfectas. Los frenos, con pinzas y discos Brembo de 320 milímetros, incluyen latiguillos metálicos para mejorar el tacto de la frenada. Y la horquilla invertida y el basculante trasero monobrazo de aluminio con amortiguador progresivo completan unas suspensiones que cumplen muy bien su cometido.

- BUENAS SENSACIONES

Boletín

Las mejores recomendaciones para viajar, cada semana en tu bandeja de entrada
RECÍBELAS

La Multistrada no oculta su carácter y se comporta como lo que es: una moto joven, dinámica y divertida. La altura no dificulta las maniobras en parado y los 200 kilos de peso se manejan muy bien gracias en parte al generoso manillar y al amplio radio de giro de la dirección, dos soluciones muy apropiadas para circular con agilidad y sortear cualquier obstáculo en los atascos urbanos.

En carretera abierta basta explorar sus cualidades deportivas para comprobar que tiene un motor dócil y apto para funcionar desde apenas 2.000 vueltas y estirarse después sin problemas hasta el corte del encendido. La respuesta es siempre lineal y muy contundente para satisfacción del conductor, y no desfallece nunca, como cualquier Ducati digna de su nombre.

Sin embargo, la Multistrada acepta también una conducción más relajada y tranquila, y está siempre lista para viajar solo o en compañía sin depender del estado del firme o la distancia a recorrer. Su capacidad de carga y autonomía (depósito de 20 litros) convierten los viajes largos en placenteros paseos.

El carenado de la Multistrada deja a la vista el chasis tubular.
El carenado de la Multistrada deja a la vista el chasis tubular.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_