Teófila Martínez rechaza crear una empresa municipal de infraestructuras que contrate a parados de Cádiz

El PP empleó ayer su mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Cádiz para rechazar una propuesta del PSOE que planteó en el pleno municipal la creación de una empresa municipal de infraestructuras que recurra a la contratación de parados gaditanos para realizar obras municipales y de otras administraciones e instituciones. La alcaldesa gaditana, Teófila Martínez, rechazó esta iniciativa al entender que es "inviable" por su "elevado coste" y porque, a su juicio, "perjudicaría a la iniciativa privada". Estas explicaciones no convencieron al portavoz municipal del PSOE, Rafael Román, quien lamentó que el Consistorio gaditano "no promocione directamente" la creación de empleo.

En la ciudad de Cádiz hay cerca de 11.000 parados, una cifra que apenas ha sufrido variaciones en los últimos cinco años pese a que se han desarrollado importantes obras de infraestructuras, como el soterramiento de la vía del tren o la nueva avenida Juan Carlos I, que circula por encima del trazado ferroviario soterrado. Según los socialistas, es "una realidad" que no se ha producido "correlación ni proporción" entra la obra pública contratada y ejecutada en Cádiz por las distintas administraciones -incluido el propio Ayuntamiento- y un descenso "ni significativo ni continuado" en el número de desempleados. Por esta razón, el grupo del PSOE apuesta por que el Consistorio cree una empresa local que "favorezca" la contratación de desempleados inscritos en las oficinas del Instituto Nacional de Empleo (Inem) en Cádiz.

Román defendió, sin éxito, en la sesión plenaria estos argumentos "convencido", según dijo, de que muchas de las obras que se ejecutan en Cádiz contratan a trabajadores de fuera de la capital gaditana. "Debería incentivarse el empleo para los gaditanos", dijo el portavoz socialista, quien señaló esta empresa como una "posible herramienta" para frenar la creciente emigración de miles de jóvenes gaditanos que han abandonado Cádiz en los últimos años en busca del puesto de trabajo que en esta ciudad se les resiste.

Por otra parte, durante la celebración del pleno, los sindicatos con representación en el Ayuntamiento se manifestaron en silencio dentro del salón plenario. Los trabajadores portaron algunos carteles en los que denunciaban la actitud del concejal de personal, Ignacio Romaní, a quien acusan de "negarse a negociar" el nuevo convenio colectivo.