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SEGURIDAD

La plaga de virus se ceba en Windows

Symantec calcula que más de 4.000 patógenos se han lanzado este año contra el sistema operativo de Microsoft - Steve Ballmer renueva su promesa de combatir la inseguridad - Los expertos critican la debilidad de los programas

La pandemia de los virus parece imparable. Estas infecciones informáticas causan graves trastornos al propietario doméstico de un ordenador y pérdidas económicas a las compañías infectadas.

Las empresas norteamericanas debían de invertir una media de 81.000 dólares en 2002 para recuperarse de un ataque de estos malignos patógenos, Según ICSA Labs. Y sus autores escogen preferentemente una víctima: los sistemas operativos de Microsoft.

La razón es sencilla. Windows está en más del 90% de los ordenadores personales y, aunque en menor proporción, los servidores Microsoft están desparramados por el mundo. Atacar Windows, por su penetración en el mercado, facilita el contagio.

Según la compañía de antivirus Symantec, sólo en 2003, se han dirigido más de 4.000 ataques de virus y otros códigos maliciosos contra Windows. Linux y Unix han tenido 11, y Apple no registra ataques desde 2001.

Los autores de virus aprovechan, además, la debilidad de los programas. El historial de agujeros de Microsoft es llamativo. Tanto, que la propia compañía ha fijado como prioridad mejorar la seguridad de sus sistemas operativos y el presidente de Microsoft, Steve Ballmer, volvió a prometerlo la semana pasada en Roma.

Ballmer argumentó que en el Lejano Oeste no cerraban los bancos porque fueran sistemáticamente atracados..., procuraban mejorar su seguridad y en ésas están.

Engaños

Los expertos critican con dureza que la industria el software lance al mercado productos tan desprotegidos de los ataques víricos. La literatura de parches que periódicamente publica Microsoft es extensísima.

Muchas veces, un virus aprovecha un agujero para el que ya se había editado un parche, y Microsoft recrimina a los administradores de sistemas que no estén atentos a instalarlos. La defensa de éstos es que es tanta la cantidad de virus, agujeros y gusanos, que se hace difícil estar al día con los remedios.

La semana pasada, ya en el colmo de la imaginación, un creador de virus diseminó un patógeno que llegaba al correo de la víctima simulando ser una nueva actualización de Microsoft para proteger otro agujero.

El nuevo gusano Swen o Gibe, objeto de alerta de grado cuatro según el Centro de Alerta Antivirus (CAT), está desarrollado en Microsoft Visual C++, tiene un tamaño de 105KB y afecta a los diversos sistemas Windows.

Aunque muchos virus aprovechan agujeros documentados y teóricamente parcheados para contagiar, no siempre ocurre así. Microsoft descubrió IFRAME el 29 de marzo de 2001, pero por motivos que nunca han sido explicados con la suficiente claridad, transcurrió un lapso de casi dos meses hasta la distribución del parche con el que los usuarios debían proteger su sistema ante la posible llegada de virus o atacantes malintencionados.

Miles de copias de su gusano Puron fueron localizadas en Internet el 9 de mayo, pero Microsoft no movió pieza hasta el día 25, con un retraso superior a dos semanas.

En opinión de la consultora Gartner, la mayoría de ataques a la seguridad de las redes corporativas que se realicen en los próximos años aprovecharán alguna de las cerca de 6.000 vulnerabilidades conocidas en la actualidad.

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