Nuevas protestas de los taxistas de Barajas contra las empresas de transporte

Unos veinte taxistas secundaron ayer la tercera jornada de protestas en el aeropuerto de Barajas en contra de la actividad de empresas de transporte de viajeros que, según afirman, operan de forma "ilegal". Por esta razón, los profesionales del taxi cortaron durante 15 minutos el servicio de recogida de pasajeros en las terminales del aeródromo internacional.

El presidente de la Federación Profesional de Taxis de Madrid, Julio Sanz García, aseguró que, pese a las promesas de responsables de la Comunidad de Madrid y del aeropuerto madrileño, aún no se les ha "convocado a ninguna reunión para buscar soluciones y estos vehículos ilegales [en referencia a los coches de las empresas de transporte de viajeros] continúan trabajando en Barajas con total impunidad".

Sanz anunció que la Comunidad de Madrid ha destacado a tres inspectores de transporte en el aeropuerto madrileño, "pero no pueden inspeccionar los vehículos sin medios policiales y tan sólo hay dos policías municipales para todas las terminales".

Los taxistas comenzaron las movilizaciones el pasado jueves para exigir a las autoridades el cumplimiento de la normativa que regula el transporte de viajeros y acabar con lo que califican como "prácticas ilegales" de empresas que captan a los pasajeros en las mismas terminales cuando el servicio tiene que ser contratado previamente con los clientes.

Visado de otra comunidad

Sanz explicó que muchos de estos vehículos de empresas particulares acuden al aeropuerto de Barajas con visados de transporte de otras comunidades autónomas y sin poseer la documentación en regla para trabajar en la Comunidad de Madrid. No obstante, las empresas privadas que recogen a los clientes en el aeropuerto niegan tajantemente las acusaciones de los taxistas y argumentan que sólo trabajan para hoteles y empresas previo acuerdo.

Durante la protesta de ayer, los taxistas que trabajan habitualmente en Barajas impidieron durante un cuarto de hora la recogida de pasajeros, mientras explicaban por un megáfono sus reivindicaciones y exigían la presencia del director del aeropuerto, Miguel Ángel Oleaga, y de responsables de la Comunidad de Madrid para que "cumplan la ley". "No queremos perjudicar al pasajero, pero tendremos que convocar paros más prolongados", advirtió el presidente de la Federación Profesional de Taxis.