Ajustes en divisas

Los mercados de valores de todo el mundo vivieron ayer una jornada muy negativa como consecuencia del deterioro del tipo de cambio del dólar.

Algunos analistas ya habían advertido desde hace tiempo sobre las consecuencias a medio plazo para la moneda estadounidense de unos déficit galopantes, pero en los mercados se jugaba entonces la baza de la recuperación económica, es decir, se actuaba a corto plazo sin tener en cuenta las consecuencias futuras.

La Bolsa de Tokio fue esta vez la que dio la alarma, con una caída del 4,24% en su índice Nikkei. La economía japonesa empieza a salir de la recesión y justo en este momento lo peor que le puede pasar es que el yen se fortalezca frente al dólar.

Las bolsas europeas siguieron el camino trazado por Tokio y, con un cambio de 1,14 dólares por euro, comenzaron a sufrir un desmantelamiento de posiciones que casi no perdonó a nungín sector, con lo que al final del día las pérdidas llegaron a superar el 2%.

El Ibex 35 cedió el 2,10%, la mayor pérdida en casi tres meses, y queda por debajo de los 7.000 puntos, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid perdió el 1,93% para cerrar en 736,79.

En esta ocasión ni siquiera Wall Street ha podido sacar provecho de una situación que, a corto plazo, beneficia a la economía de Estados Unidos, ya que un dólar más barato favorecerá las exportaciones y puede ser el empujón definitivo para iniciar la recuperación con firmeza en este tramo final del ejercicio. A media sesión el índice Dow Jones perdía el 1,13% e inquietaba a los inversores de medio mundo.

Entre los mercados europeos destacaba la caída de Francfort, con el 3,19%, cuando aún faltaban unos minutos para el cierre, mientras que París bajó el 2,69%; Milán, el 2,36%, y Londres, el 0,68%.

La contratación en el Mercado Continuo ascendió a 3.088,64 millones de euros, una cifra engañosa, puesto que prácticamente la mitad procedía de operaciones institucionales.