El parque de vivienda nueva crece un 31% en lo que va de año

La construcción sigue su ascenso imparable en la Comunidad Valenciana, a tenor de los datos recogidos por el Boletín Estadístico del Ministerio de Fomento. Los visados de dirección de viviendas de nueva planta se incrementaron un 31% de enero a mayo con respecto al mismo período del año anterior, cuatro puntos por encima que la media nacional. Durante los cinco primeros meses, comenzaron las obras de 42.404 inmuebles, casi diez mil unidades más que el año precedente. En los últimos cinco años, el aumento del parque de viviendas nuevas se disparó un 74%.

Las previsiones de la patronal sobre la continuidad del crecimiento de la construcción tienen visos de cumplirse, en base a los datos recogidos por el Ministerio de Fomento. Su último boletín estadístico certifica que el parque inmobiliario de la Comunidad Valenciana sigue con su imparable crecimiento. Durante los cinco primeros meses de este año, el número de visados -documento imprescindible para la autorización de inicio de los trabajos, ampliación o reforma- de obra nueva fue de 42.404, cifra que representa un 31% más de documentos expedidos con respecto al mismo número de certificados durante el mismo período del año anterior. Además, este porcentaje se sitúa cuatro puntos por encima de la media nacional, cifrada en un 27,09%.

De enero a mayo de 2002, el número de visados fue de 32.446, cifra que supone 9.958 unidades menos que las registradas durante los primeros cinco meses de este año. Si bien el número de expedientes concedidos durante los primeros meses de 2002 (32.446) fue algo inferior en comparación con el mismo período de 2001, con 33.724 unidades; en global, el crecimiento en la Comunidad Valenciana de la planta inmobiliaria en 2002 fue un 7% superior con respecto a 2001.

En el caso de mantenerse este ritmo -31% más, durante los primeros cinco meses-, el aumento anual del parque de viviendas nuevas alcanzaría cifras formidables, continuando así la tendencia alcista de los últimos cinco años. Según el Boletín Estadístico de Fomento, en 1997 se visaron 45.648 para viviendas de nueva construcción. Esta cifra aumentó un año después en 12.485 expedientes. Las solicitudes para construir viviendas nuevas fueron en aumento en 1999, con 78.769 visados concedidos. El año 2000 marcaría un punto de inflexión, ya que se alcanzaron los 82.775 certificados. A partir de ahí, la tendencia fue decreciente: en 2001, 74.371 y 2002 con 79.607.

Los datos reflejan que, del total de viviendas en construcción en 2003, a casas unifamiliares se destinaron 11.933. En bloque se visaron 30.286, y a otro tipo de edificación se destinaron 185. A este número de viviendas, el boletín indica que se suman otros 2.837 visados, de los que 845 correspondieron a viviendas a ampliar y otras 1.992 a reformas.

En global, el número de actuaciones urbanísticas de viviviendas realizadas en la Comunidad Valenciana -incluidas ampliaciones y reformas- también experimentó un crecimiento paralelo, cifrado en casi un 32%. Según el Boletín Estadístico del Ministerio de Fomento, el número de visados expedidos durante los primeros meses de este año para ampliar, restaurar y construir edificios de nueva planta fue de 45.241 frente a las 34.379 unidades anteriores.

Locomotora económica

Los datos recogidos en la estadística de Fomento corroboran las previsiones de la Confederación Nacional de la Construcción que cifró el crecimiento para este año en un 3,5%, pese a la incertidumbre global.

Según estimaciones de la cúpula empresarial, lanzadas en marzo, la construcción se convertirá por segundo año en la locomotora de la economía nacional. La patronal del sector instó, entonces, a las administraciones locales y autonómica para que articulen medidas encaminadas a contener la subida de los precios de las viviendas. Los empresarios de la construcción apuntan al elevado precio del suelo como la primera causa del desproporcionado incremento del coste de la vivienda en los últimos años. Por ello, su presidente, Juan Lazcano, incidió en la necesidad de aplicar políticas liberadoras de los terrenos para que éstos se valoren en sus justos términos. Por su parte, Tinsa, consultora especializada en tasaciones inmobiliarias, explica la meteórica crecida de los precios en la falta de atractivo de las inversiones alternativas como la Bolsa, por su incertidumbre, y la Deuda Pública, por su baja rentabilidad.